Un suboficial de la Armada fue condenado a 9 años de prisión en el marco de la causa que se le siguió por abusar de su hijastra menor de edad y filmar estas agresiones sexuales para su posterior distribución como pornografía infantil, según informó el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires.

A este fallo se llegó tras una investigación iniciada hace un año y medio por el Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) y la Fiscalía de la Ciudad, a partir de un alerta del Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC) de los Estados Unidos.

Las pesquisas comenzaron el 23 de marzo de 2016, cuando la justicia porteña recibió una alerta de prioridad número 1 del Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC) de los Estados Unidos por  distribución de material de pornografía infantil en Internet desde una dirección IP de Argentina.

El CIJ rápidamente vinculó la denuncia de prioridad 1, -que implica la posibilidad de que un menor se encuentre en peligro- con otras que se estaban investigando del mismo usuario por publicación de imágenes de pornografía infantil en la red social Facebook y dio intervención al fiscal Martín López Zavaleta, titular de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas Nº 30.

A partir de la detección de imágenes de lo que se denomina producción «casera», que es cuando el pedófilo sube material de sus abusos a un menor, el fiscal ordenó realizar tareas de investigación para dar con el inmueble donde habitaba el imputado y desde donde publicaba el material pornográfico, lo que se consiguió tan solo 24 horas después.

Ese mismo día se realizó el allanamiento del departamento en cuestión en el barrio de La Boca, donde se secuestraron vestimentas y objetos que aparecían en las fotografías pornográficas; elementos que servirían luego como pruebas.

El fiscal Martín López Zavaleta solicitó la prisión preventiva del imputado por abusos cometidos a una persona menor de edad, agravados por su condición de adulto conviviente, y la producción, publicación y distribución de imágenes pornográficas de personas menores de edad; lo que le fue concedido por el juez en lo Penal, Contravencional y de Faltas Nº 10 Pablo Casas, que posteriormente se declaró incompetente por tratarse de un delito que aún está en manos de la Justicia Nacional.

El fiscal Martín López Zavaleta destacó “la premura con la que trabajó el Juzgado Nº 10 al comprender la urgencia del caso y librar las órdenes solicitadas por la Fiscalía garantizó el resultado exitoso del caso”, que concluyó el pasado 3 de octubre con la referida condena.

Por su parte el juez Pablo Casas recordó a Télam que “todo esto sucedió en un fin de semana largo de Pascua y estuvimos trabajando 72 horas sin parar para poder lograr el éxito de esta investigación».

«De esta forma Poder Judicial de la Ciudad ratifica la lucha que tenemos para erradicar toda situación que involucre abuso sexual a un menor de edad”, dijo.