¿Estamos ante un dramático cambio de estilo de las posesiones demoníacas? ¿Qué nos lleva a dudar de la salud mental de muchas personas?

Aunque esto no sucede no todo el tiempo, hay momentos en que parecen razonables, pero hay otros en que se zafan, como que pierden las referencias.

¿No has visto eso en personas que conoces?.¿La gente no se da cuenta de las consecuencias de lo que está diciendo o haciendo?.¿Hay un virus que produce insanía moral corriendo por el agua que bebemos?.¿O es el maligno que está cambiando la forma de poseer a las personas?.

Acerca de estos y otros interrogantes, el padre Dwight Longenecker tiene una teoría, que a continuación desarrollamos.

Longenecker es un estadounidense que ha pasado la mayor parte de su tiempo, viviendo y trabajando en Inglaterra. Fue educado en un hogar evangélico en Pensilvania.

Después de graduarse de la universidad fundamentalista Bob Jones, con una licenciatura en Speech and English, fue a estudiar teología en la Universidad de Oxford. Finalmente fue ordenado sacerdote anglicano y sirvió como cura, capellán de la escuela en Cambridge y párroco en la Isla de Wight.

Reingeniería moral

¿Estamos frente a un nueva forma de posesiones? Sería una falta de sentido de la realidad pensar que la reingeniería moral anticatólica utiliza sólo la fuerza en Occidente para imponer leyes inicuas.Que imponen el aborto, la anticoncepción, la ideología de género, la eutanasia y toda serie de males que están alejando a la humanidad del camino de la preservación de la naturaleza.

Si bien la coacción desde el poder existe, la mentalidad de los occidentales ha cambiado, a nivel de los valores de cada persona.Y aceptan con gusto conductas que antes se consideraban desviadas, que atentan francamente contra la vida en el planeta.

Sólo en el Cielo y en el infierno saben toda la historia de cómo los seres humanos se dejan arrastrar por acciones tan brutalmente inhumanas, para las que es necesario un auto-engaño monumental.

Una forma diferente

Y no podemos más que pensar en la mano satánica oculta detrás de esto, pero quizás de una forma distinta a la que hemos considerado históricamente.Hay consenso entre la mayoría de los católicos -que aún creen en satanás-, que las grandes líneas de su estrategia están claras.

Poco a poco, el nuevo estándar de lo bueno se convierte en la tecnología: lo que se puede hacer se debe hacer, con la esperanza de que en algún momento en el futuro, gracias a la tecnología médica se pueda solucionar todo, por ejemplo podremos a vivir para siempre.

Una vez que aceptamos que la vida está hecha para el placer en vez de para servir a Dios y al prójimo, en preparación para la verdadera vida en el cielo, la medida de una vida de éxito se convierte en la ausencia de dolor y la experiencia del placer.

Pero para que esto haya sucedido a nivel masivo, debe también haber habido una presencia sobrehumana negativa al lado de cada persona.

Quizás no sólo tentándola sino también “tomándola” de alguna forma para profundizar el cambio moral de la sociedad.Y aquí caemos en la consideración de la posibilidad de una nueva estrategia satánica.

¿Que son las posesiones lights o intermitentes en muchas personas, que pueden hacer de sostenedores ideológicos del cambio?.

Más comunes de lo que se piensa

Estamos acostumbrados a pensar que las posesiones diabólicas son un fenómeno raro y que una vez que un individuo es poseído es muy evidente, con numerosos signos sobrenaturales.

Sin embargo, tal vez puedan ser más comunes de lo que pensamos, porque quizás sean menos evidentes y hasta temporales.Seguramente todos tenemos experiencia con personas que realmente pierden sus cabales cuando se les habla de religión.

Y experimentan una especie de furia atacando salvajemente y sin miramientos a quien profesa una religión.O quizás haya otros que lo hagan más diplomáticamente pero con eficacia parecida.

Cambio de actitudes

Y es más, quizás hasta hemos visto, como es mi caso, personas que arremeten de vez en cuando y por períodos, contra las personas que saben que son fieles cristianos, con brutales agresiones sin motivo directo aparente que escapan a todo intento de catalogar sus reacciones como normales y llevan a pensar que la persona tiene algún grado de locura.

Pero que luego, en el resto de su vida diaria, se conducen normalmente, sin que nadie que haya visto a la persona en esos trances de ataques furiosos tenga elementos para alegar insanía mental, y mucho menos una posesión.

Esto que está sucediendo cierra con la lógica del maligno, que es el rey de la mentira y del camuflaje.

¿Por qué razón él estaría interesado en hacer tan evidentes -en todos los casos- las posesiones con actuaciones sobrenaturales como se ven en las películas?.¿No sería más eficaz para él, tener poseída a una persona y que pase lo más desapercibido posible para los demás?

¿Suena razonable, no?.