Por Guido Brunet
Bajo el lema «#NiUnaMenos» se realizó una nueva convocatoria contra la violencia de género en un día en el que el país se puso de acuerdo y en varias provincias se levantó la bandera de la lucha contra los maltratos hacia las mujeres y los femicidios.
Alrededor de las 16.30 los asistentes se congregaron en la Plaza Montenegro para una hora después comenzar a marchar con destino al Monumento a la Bandera. Distintas organizaciones sociales, gremiales y políticas junto a universidades, estudiantes y artistas se unieron por una misma causa. Entre las organizaciones que participaron se encuentran Pan y Rosas, Mumalá, Patria Grande, Centros de Estudiantes de las distintas escuelas de la UNR, el Colegio de Psicólogos de la ciudad, el gremio de Trabajadores del Estado (ATE) y la Asociación Gremial de Docentes e Investigadores (Coad).
Encabezando la marcha se encontraba Fernanda Serna, víctima de violencia de género durante 8 años y que hasta el día de hoy, sufre el hostigamiento de su agresor. En diálogo con Conclusión, Fernanda Serna remarcó la importancia de la marcha y recordó «lo mucho que falta» en materia de derechos para las mujeres. «Cada vez somos más las organizaciones trabajando porque hay una ausencia total por parte del Estado y sobre todo en la Justicia, falta muchísimo todavía desde el Estado municipal, provincial y nacional, pareciera que hay un poco de interés, comenzamos con los juicios por violencia de género, pero hay una gran violencia institucional cuando denuncias y no obtenés respuestas», afirmó. Y Serna agregó: » Cada vez son más jóvenes las víctimas y seguimos con una sociedad que juzga, la sociedad debe posar la mirada sobre los agresores, sobre los femicidas y los violadores y no sobre las mujeres que terminamos con la vida arruinada por completo y muchas muertas».
A lo largo del trayecto, miles de personas decidieron participar de la marcha por motivos diversos, pero todos bajo la misma consigna, decirle basta a la violencia contra la mujer.
Nannugallo, una «sobreviviente de violencia de género», como se define, contó a Conclusión su experiencia para que otras mujeres no tengan que vivirla. «Yo peleaba por esto por la igualdad antes de ser violentada y luego sufrí este tipo de actos por parte de parejas. Pero necesitamos que el Estado tome medidas efectivas y es importante educar a los niños en la igualdad. No se explica sobre sexualidad, familias ensambladas. Si la escuela no colabora vamos a seguir teniendo un femicidio cada 3o horas«. En su caso, la Justicia actuó para protegerla, pero cuenta que «cuando era menor no me querían tomar las denuncias porque decían que tenia que representarme un mayor».
Por su parte, Liliana Leyes, de Ate manifestó: «Desde el gremio venimos sosteniendo la bandera a nuestra compañera Graciela Príncipe y Melissa Bogarín que fue víctima de un infarto después de haberse enterado que posiblemente corría peligro su fuente laboral, la habían despedido un mes antes de lo que pasó con su pareja y acompañamos también a Laura Iglesias que yendo a su trabajo fue violada y asesinada. Para el sindicato es muy importante el ´Ni una menos´ y en esto se encuentra ni una despedida menos, ni una víctima de la precarización laboral. Es importante visibilizar la violencia de género y los femicidios, que la cultura machista se vaya enterrando y que surja una transformación social que hasta ahora no vemos«.
En el Monumento a la Bandera, símbolo en la ciudad de cada reclamo popular en la ciudad, algunas mujeres tomaron la palabra y luego los cánticos (que acompañaron casi toda la marcha), volvieron a oírse en el lugar.
En esta edición, muchos de los asistentes llevaban consigo una vela representando cada mujer que sufrió violencia y que no puede estar allí para manifestarse. «Es un homenaje a las mujeres que han muerto producto de la violencia de género».
Horas antes, la jornada de lucha por los derechos de las mujeres comenzó desde esta mañana con una intervención en los Tribunales provinciales en contra de “la justicia patriarcal” y para exigir avances en las causas de violencia contra la mujer.
El ‘Ni Una Menos’ ya comenzó con una intervención en Tribunales
