La directora del Estudio Bein y Asociados, Marina Dal Poggetto, estimó que el gobierno podrá cumplir con la pauta de déficit del 4,8% del PIB, aunque consideró que deberá «revisar los pronósticos» para los dos años siguientes y estimó que la inflación anual estará cerca del 40 por ciento, a pesar de una desaceleración en la segunda mitad del año.

Dal Poggetto consideró que «en mayo calculamos cerca de 3,9% de suba de precios, lo que lleva a una inflación interanual del 44 por ciento interanual, entre el arrastre de la suba de tarifas y los aumentos de naftas y cigarrillos».

Asimismo, la economista proyectó que la inflación «va a descender en octubre al 1,5 y 2 por ciento mensual».

«Si lo comparamos con la inflación de octubre pasado, claramente no vamos a estar mejor, pero sí respecto del shock de precios de la primera etapa del año», consideró.

Explicó que «con el dólar tranquilo o cayendo, y con ingreso de capitales, tanto por el lado de la soja y para aprovechar la tasa de interés, y si no hay nuevos aumentos tarifarios, es probable que la segunda mitad del año haya una desaceleración importante de la inflación».

«Sería probable que a fin de año la inflación termine en 1,5 ó 1,8 por ciento mensual, aunque con una suba total del 40 por ciento en el año», indicó la economista.

Por otro lado, calculó que pese a los mayores gastos por el pago a jubilados, el Gobierno va a «poder cumplir la meta fiscal para el año» de un 4,8% al sostener que se compensará con los resultados del blanqueo de capitales ese mayor gasto.

No obstante, consideró que como el blanqueo «es un financiamiento transitorio y estará ausente el próximo año,  por el pago a jubilados seguramente se comprometerán las metas fiscales de largo plazo proyectadas y es probable que haga falta una reconsideración para los próximos dos años».

Al referirse al nivel de actividad, Dal Poggetto dijo que «tendremos una mejora en la actividad a partir de agosto, pero respecto de este año, porque si miramos el año pasado, en la comparación vamos a estar peor».

Por último, especuló que ese avance se dará porque mejorará el poder de compra de los salarios, se incrementará la obra pública, porque habrá baja de tasas e incentivos al financiamiento de las pymes, ya que seguirán entrando inversiones y se facilitará el acceso al crédito.