Por Jorge Sansó de la Madrid
La Iglesia Católica de Santa Fe echó por tierra las especulaciones respecto de un extraño fenómeno, o más bien una sugestión, en torno a la Virgen de Guadalupe, en la capital provincial.
Es que, hace unos días, hombres de fe que hacían un retiro espiritual vieron algo que parecía una silueta humana y que creyeron identificar como la imagen sagrada. Y anteayer, algo parecido sucedió en el colegio de San José de Guadalupe, donde algunas alumnas de establecimiento dijeron haber tenido una visión similar en la custodia del altar, donde de exhibe una hostia redonda.
La noticia, que ya antes había causado conmoción, corrió esta última vez con la rapidez de un milagro, aunque en esta ocasión llevada por la más terrenal tecnología: las redes sociales. Si en poco más de diez días la Madre de Dios se manifestaba, no pocos comenzaron a preguntarse si se trataba de algo para tomar en serio.
Y las consultas fueron a las autoridades eclesiásticas. Pero éstas descartaron que se trate de un fenómeno extraordinario carente de explicación.
Una «hostia normal». «Es una hostia normal, no hay nada en ella». La frase que dijo el padre Olidio Panigo, delegado episcopal de la Basílica de Guadalupe, clausuró las discusiones, aunque causara cierta desilusión entre los creyentes, más deseosos de ser testigos de una aparición mariana.
El clérigo aclaró a la prensa que las hostias fueron revisadas y no se halló cosa extraña alguna ni nada de lo que en uno y otro caso los testigos creyeron ver.
Una explicación posible es que, al estar la hostia entre dos vidrios, estos reflejaran las luces del salón en el caso de los hombres en retiro —porque allí dijeron haber visto la sombra en horas de madrugada— o los rayos de sol anteayer, dado que las alumnas aseguraron haber visto lo que creyeron ver, pero en horas de la mañana.
Los martes las alumnas del San José tienen una hora de adoración al Santísimo en que rezan frente a la custodia. La misma en la que supuestamente vieron la sombra que se les asemejó a la silueta de María bajo la advocación de Guadalupe.
