Por buen camino. Es que la Concejalía Popular logró negociar siete de los ocho remates de vivienda única o familiar que estaban previstos para los primeros días de agosto y sólo un caso quedó pendiente para tratarse la semana próxima, y todo indica que hay posibilidades de acuerdo ya que «el juez aseguró estará dispuesto a escuchar a las partes».

«Es una alegría muy grande y el resultado de la honestidad del abogado defensor, de la disposición de la jueza de escuchar hasta las últimas instancias, de la lucha incansable de la Concejalía Popular y de todas las organizaciones que acompañaron en el proceso», dijo orgulloso a Conclusión Nire Roldán, titular de la organización.

Así, de los ocho remates, seis pudieron negociarse durante la semana y uno -caso del jubilado y su esposa discapacitada- logró hoy un convenio evitando la convocatoria anunciada para esta tarde a las 14 frente al Colegio de Martilleros.

«El convenio soluciona la coyuntura, dilatando el pago y dándole más tiempo al jubilado para juntar la plata -5 cuotas pendientes de 35.000 pesos cada una-«, explicó y continuó: «En la segunda etapa del convenio esperamos poder tratar la ley que suspende los remates porque es totalmente injusto que sobre una deuda original de 11.000 pesos, contraída para ayudar con la enfermedad de su esposa, le terminen demandando 94.000 pesos».

En ese sentido, se quejó de la existencia de los remates y dijo que «por un lado los costos judiciales abultan enormemente la deuda y por otro hay intolerancias por parte del acreedor, quien se dedica exclusivamente al negocio del dinero y le parece lícito que se produzca el remate porque piensa que la persona es un deudor, una persona que no quiere pagar», disparó indignado.

Para concluir, Roldán espera que luego de las elecciones del 13 de agosto el tema se debata en el Concejo y se avance «sobre cuestiones jurídicas, porque lo que viven estas personas es realmente un abuso».

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Denuncian que pretenden rematar ocho inmuebles de vivienda única o familiar