Conclusión dialogó con Ignacio Rivoire, operador de sonido y dueño de la empresa Suena Rosario, sobre la dinámica de trabajo que desarrollan estos profesionales a la hora de encarar el armado de un espectáculo.
¿Cómo descubrís esta profesión de ser técnico operador de sonido?
Mi viejo tenía boliches y uno de ellos era un boliche de rock, se llamaba Vicente Lopez, en ese momento yo tenía 8 años. Distintas bandas visitaron el lugar entre Bersuit Vergarabat, Ataque, entre otras. En ese momento mi viejo, Pablo, laburaba con Triump una empresa de sonido de Rosario y yo era el pibe que estaba ahí “molestando” y aprendiendo algunas cosas, viendo pruebas de sonido. Luego de un tiempo, comienzo a laburar en la Sub Sede y arranque operando a los 15 años ahí dentro del mundo del folklore con Abonisio, Fandermole, entre otros.
¿Qué significa ser operador de sonido?
El operador de sonido tiene bastante responsabilidad ya que es una persona que esta a cargo de un show y esta bastante oculta. Generalmente la gente no tiene idea que hace ese individuo en ese cargo. Por ejemplo, un guitarrista puede hacer un solo que está ensayado varias veces especialmente para ese show y ene se momento no se escucho claramente y es, a pesar que puede haber varios motivos, el responsable de que se escuche todo como se debe escuchar. El operador de sonido debe resolver todos los problemas que surjan a nivel sonido para que todos los espectadores disfruten de ese show.
¿A qué desafíos te enfrentas en esta profesión?
Depende el show o el espectáculo que vayas a cubrir. Acá en Argentina se labura a un nivel que esta bueno, pero básicamente es ser un todo terreno, desde buscar tensión para enchufar los equipos hasta acomodarse en el lugar. El operador no solo es operador, sino que también carga, descarga, arma y desarma. Acá, en Suena, hago todo, desde armar los baúles hasta limpiar el baño. Literalmente somos todo terreno.
¿Qué importancia tiene para el operador construir una buena relación con el músico al momento de operarlo técnicamente?
Y eso es todo. A medida que va pasando el tiempo y van pasando los años vas construyendo amistades, vas conociendo tus bandas que son las que laburas. Y lo más interesante que vas creciendo musicalmente y vas conociendo más de música. Ya sabés como laburan las bandas, como suena el baterista, cuando la banda tiene su sonido. Y luego, vas encontrando bandas de mayor rango y vas entendiendo porque llegan a hacerse tan conocidas.
¿Sentís presión a la hora de operar un show?
En todos los show tenés presión. Creo que esa adrenalina de que se apaga la luz y empieza a sonar cualquier operador la siente. Esa mini taquicardia que se siente a mi no se fue nunca. Estas con esa expectativa de que es lo que va a pasar porque esta por arrancar algo que es re importante y solamente vos, y más si armaste el equipo, sabés que es lo que esta sucediendo.
¿Pensás que esta valorizado este oficio en nuestro país?
No. No sé si se puede generar una manera de trabajar hoy en día como están las cosas. Si no es por una cosa o por otra siempre esta faltando un mango para comprar un ticket, se hace muy difícil en la movida independiente que se reconozca a los técnicos como se los tiene que reconocer. A mi lo que mas alegría me da es que salga bien el show y que queden todos contentos.
¿Qué pensás de la autogestión y de la movida independiente?
Me parece que la movida esta mejor que otro tiempo. Me parece que en Rosario tenemos un nivel espectacular de músicos. Tenemos géneros que en otras ciudades ni siquiera se asoman, como el rocksteady, como el reggae, y te ponés a observar a músicos que están tocando para 50 personas y tienen el talento para hacerlo en un estadio para 20000 personas. La autogestión está mejorando un montón, la gente apoya y quiere ver algo mejor y se da cuenta cuando las cosas están bien hechas. Por eso, si el músico logra hacer una red de distintos proveedores y diferentes herramientas, queda un producto interesante. Igualmente, hay que reconocer que no es fácil conseguir un lugar o una técnica decente y ahí es cuando el músico “pichulea” a la hora de pagar un buen sonido, y el espectáculo se ve completamente afectado.
¿Qué consejos les das a los músicos a la hora de contratar una técnica de sonido?
Tiene que ver con el momento de la banda. Cuando la banda esta comenzando, hay gente que lo tiene que hacer con los recursos que tenga. Pero eso tiene una fecha de vencimiento. En un lapso de tiempo hay que tenerle respeto al audio y es necesario mejorarlo. La técnica es muy importante, por eso no hay que abaratar ese costo.
