A causa de motivos propios de la actividad comercial de la familia Macri, que coincidieron con el inicio de Mauricio como ejecutivo del holding Socma, no sólo conoce a Donald Trump sino que el presidente apostó por los demócratas desde que llegó a la Casa Rosada. Sin embargo, el 45to. presidente de USA es Donald Trump.

La política exterior argentina tendrá que tomar nota de la nueva realidad, y adaptarse. Debería resultar inevitable que Macri revise sus próximos pasos para no repetir errores recientes.
Una pregunta inevitable: ¿cómo quedará la canciller Susana Malcorra, de alguna forma imprudente en sus manifestaciones previas?

Recalculando, ella que «la visión de Clinton es más cercana» a la de Cambiemos, pero si Trump gana habrá que «adecuarse» y «tratar de conectarse de la mejor manera posible» con él. Tampoco acertó con la redefinición.

Más prudente estuvo el asesor presidencial Jaime Durán Barba: «La mayoría creía que Donald Trump era un payaso fácil de derrotar, que se enfrentaba a una de las candidatas más calificadas de la historia norteamericana. Trump, con estar en este sitio, en esta situación, ha triunfado, porque conservar sus posibilidades enfrentando a los demócratas, al establishment republicano, a casi toda la prensa, a los medios universitarios, a las ONG, a casi todo el círculo rojo, a la opinión sensata en el mundo».

También él agregó: «En esta elección se enfrentan los dos candidatos con la peor imagen en la historia el país. Las cifras con que terminan la campaña son muy malas. En las facultades de consultoría se sabe que cuando los negativos están sobre 30% matan a un candidato convencional. En el caso de Trump, el tema de los negativos actúa de manera inversa. Desde el análisis electoral es un anticandidato, y por eso mientras más rompe las reglas, consigue más votos. Sus votantes son personas que no buscan la reencarnación de (Konrad) Adenauer, quieren patear el sistema. Sus violentos ataque en contra de la prensa, las instituciones, los partidos políticos, incluido el suyo, lo fortalecen. Sus caídas de popularidad en la campaña han tenido que ver con los momentos en que trató de parecer tradicional».

El abogado famoso como politólogo Rosendo María Fraga realizó 3 apreciaciones a tener en cuenta:

  •  “Si gana Trump no sólo se puede esperar un aumento de la tasa de interés, que eso complica a la Argentina: también un aumento del proteccionismo y de los commodities. Las 3 variables podrían generar efectos adversos de distinta intensidad para Argentina desde el punto de vista económico”.
  •  “Con Obama, la Argentina ha tenido una situación excepcional. Cuando dijo en marzo que la Argentina era el ejemplo para la región, es lo que Bill Clinton decía 20 años atrás respecto de Chile. Pero esta centralidad de Macri con Obama no va a seguir”.
  • “Es un error pronunciarse a favor de un candidato. Tenemos que volver a la tradición de que los presidentes en ejercicio no intervienen en los procesos electorales de los otros países. Algo que fue muy negativo del año pasado en la campaña electoral fue que Dilma Rousseff, Michelle Bachelet y más, jugaron del lado de Daniel Scioli. Para eso en todo caso están los ex presidentes”.