Francia se impuso este miércoles a Brasil por 31-16 (17-7 al descanso), en el partido inaugural del Mundial de handbol en el país galo, iniciando así con una victoria la defensa del título mundial logrado hace dos años en Qatar, y colocándose líder de la llave A con 2 unidades.

El combinado brasileño no dio la sensación en ningún momento de poder estropear la fiesta local, aunque en la primera mitad obligó a una serie de buenas intervenciones al veterano meta local Thierry Omeyer, superviviente del título de 2001, lo que unido a la mayor consistencia y calidad de los vigentes subcampeones olímpicos, propició la goleada.

En un pabellón Accor Hotels Arena vestido de gala para la ocasión, con más de 15.000 espectadores, y con la presencia en el palco del presidente francés François Hollande y de la alcaldesa de la capital, Anne Hidalgo, Francia demostró que la brecha que le separa del elenco brasileño sigue siendo mucho mayor que la que distancia a ambas potencias en otros deportes como el fútbol.

No en vano, Brasil nunca se había clasificado para cuartos de final de un torneo mayor hasta los pasados Juegos de Río, en los que cayó precisamente ante el combinado galo, que se proclamaría a la postre subcampeón olímpico, y que busca su sexto entorchado mundial.