El huracán Matthew se debilitó a categoría 3 cerca de la costa de Florida
Tras ocasionar más de 300 muertes en Haití y cuatro en República Dominicana el meteoro se trasladó hacia Miami donde se preparaban para lo peor pero sólo se produjeron cortes de luz y fuertes lluvias.
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- Oct 7, 2016
El estado de Florida enfrentaba este viernes el huracán más desafiante de su historia reciente con la llegada de Matthew y sus vientos de hasta 210 km/h, que amenazan con destruir las zonas costeras y obligaron a las autoridades a tomar las más grandes precauciones, tras dejar una estela de muerte y destrucción en Haití.
El ojo del huracán se encontraba a 100 kilómetros de Fort Pierce, según el gobernador de Florida Rick Scott.
Tras una travesía mortal por el Caribe, donde dejó más de 300 muertos en el departamento del Sur de Haití, según el senador por esa región Hervé Fourcand, el huracán se aprestaba a golpear el sureste de Estados Unidos en la madrugada de este viernes.
Matthew causó también cuatro muertes en República Dominicana, donde más de 36.500 personas fueron evacuadas.
El reporte de las 04H00 GMT del viernes del Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos señala que el huracán registraba vientos máximos sostenidos de 210 km/h y se desplaza a 20 km/h.
Está previsto que el meteoro provoque «impactos potencialmente desastrosos» en Florida, según el NHC. «Es el huracán más potente que golpea esta zona en décadas», advirtió el organismo, y subrayó que podría generar inundaciones mortales.
El presidente Barack Obama anunció el estado de emergencia en Carolina del Sur, Georgia y Florida, lo cual permitirá desbloquear rápidamente recursos de asistencia y que las agencias de seguridad interior (DHS) y de gestión de situaciones de emergencia (Fema) coordinen las labores de socorro.
Alrededor de 1,5 millones de residentes de la costa de Florida recibieron la orden de evacuar, así como más de un millón en Carolina del Sur. En Georgia, donde se espera que Matthew llegue el sábado, también se ordenó evacuar a los habitantes de seis condados de su litoral.
Amenazado por el huracán, el condado de Volusia sobre la costa este del estado de Florida y la ciudad de Daytona Beach, donde se localiza un afamado circuito automovilístico, decretaron un toque de queda a partir de las 04H00 GMT de este viernes, según los bomberos de la ciudad.
El toque de queda, de carácter obligatorio, estará en vigor hasta el sábado 8 de octubre a las 11H00 GMT, precisaron los bomberos en su cuenta de Twitter.
Haití, el más golpeado
Haití fue el país más golpeado por este huracán, donde dejó «más de 300 muertos» en el departamento del Sur, de acuerdo a informes del senador Fourcand, quien precisó que ese balance es aún parcial y rechazó informes del ministerio del Interior haitiano que cifraba en 122 los muertos por el pasaje de Matthew.
Solo en el municipio de Roche-à-Bateau, en el sur del país, hubo «al menos 50 muertos», informó por teléfono a la AFP el diputado del departamento del sur Ostin Pierre-Louis.
Y en Jeremie, capital del departamento meridional de Grande Anse, de unos 30.000 habitantes, un 80% de los edificios fueron arrasados por el huracán, indicó la ONG Care en su cuenta de Twitter.
Los habitantes del barrio Sous-Roche, en Los Cayos, trataban de reparar sus viviendas.
«Pasé los dos días en pie, sin dormir. Debemos ayudarnos entre nosotros», afirma Dominique Osny. «Todo el mundo es víctima aquí, las casas fueron arrastradas por el agua, perdimos todas las chapas, yo perdí hasta mi partida de nacimiento», se lamenta.
El viento y las lluvias inundaron cerca de 2.000 casas, dañaron 10 escuelas, destruyeron importantes superficies agrícolas, empresas, rutas y puentes. Más de 21.000 personas fueron evacuadas e instaladas en refugios provisorios.
Haití, muy vulnerable a las inclemencias climáticas debido a una importante deforestación, intenta aún recuperase del terremoto de 2010 que dejó más de 200.000 muertos en el país más pobre del Caribe. Ahora teme que resurja la epidemia del cólera, dado que se registraron ocho nuevos casos.
Daños en infraestructura en Bahamas
El gobernador Rick Scott de Florida, un estado acostumbrado a las tormentas tropicales, urgió a sus conciudadanos a no esperar hasta el último minuto para dirigirse hacia las rutas y evitar así verse atascados en embotellamientos.
Los candidatos presidenciales, Hillary Clinton y Donald Trump, también exhortaron a los ciudadanos a que evacuen las zonas en peligro, aunque algunos habitantes desafiaban estas recomendaciones.
Judy Ruscino, de 74 años, explicó que ella y su marido se refugiaron en el garaje de su casa de la costa. «Hemos comprado comida y la puerta del garaje está protegida contra las tormentas», aseguró.
Según las autoridades aeroportuarias, se anuló el 90% de los vuelos previstos para este jueves en Miami.
La devastadora potencia de Matthew golpeó el archipiélago de las Bahamas, donde se cerraron los aeropuertos y los cruceros turísticos fueron desviados, pero hasta el momento la Agencia Nacional de Manejo de Emergencias no reportó víctimas fatales.
Muchos edificos sufrieron daños, pero éstos no amenazan sus estructuras. Fuertes marejadas provocaron inundaciones, pero el agua no alcanzó a penetrar en las viviendas.
Caminos y rutas resultaron afectados por árboles y líneas de electricidad caídas, pero en general los daños han sido menores a los esperados.