Por Pablo Martínez

En la despedida de Marco, Central tuvo mentalidad ganadora, pegó en los momentos claves y se despidió del certamen con una sonrisa, a pesar de la mala perfomance en el transcurso del mismo. El elenco de Somoza fue contundente pero también exhibió los errores defensivos de siempre, tendrá que barajar y dar de nuevo para ser competitivo.

No era un partido más, la despedida de Marco Ruben eclipsó todo, pero desde el arranque el elenco de Somoza quiso asumir el protagonismo y aprovechó el andarivel derecho para atacar, vía Montoya.

Hubo notorias diferencias entre uno y otro, el equipo alternativo que presentó el Pincha no pudo con un Central de mentalidad ganadora, salió a buscar la victoria desde el vestuario.

La primera jugada de peligro se produjo tras un centro de Montoya que cabeceó Marco Ruben y la pelota se fue cerca del arco Pincha.

Pero el gol no tardó en llegar, Ruben aprovechó una carambola entre los defensas de la visita, cedió al Pupi Ferreyra y con estupendo remate cruzado abrió el marcador.

A la media hora de juego llegó el segundo y la tranquilidad, con el gol del pibe Veliz (anotó su segundo tanto consecutivo) y el cotejo parecía liquidado, porque el rival no tenía argumentos suficientes para complicar al golero Servio.

En el complemento, llegó el gol del homenajeado, Marco Ruben capturó un centro y si bien no pudo dominar con exactitud la bocha, se reacomodó y con un fortísimo remate puso el 3-0, que hizo delirar al pueblo Canalla.

Estudiantes ensayó una reacción pero todo era estéril, le quedaba muy lejos el área rosarina para el equipo visitante. Sin embargo, la visita descontó vía Piñeiro tras un show de errores defensivos, mal en la marca y una endeble respuesta del uno, una constante en el certamen.6

Si bien, la noche de sábado fue cargada de alegría y emoción, el conjunto centralista cierra un torneo para el olvido, en los últimos puestos y con un funcionamiento futbolístico que no convenció en la Copa de la Liga. Con el Kily González en el inicio, perdiendo el clásico y dejando muchos puntos en el camino, como también sucedió en la corta gestión de Somoza, que parece tener como límite el partido por Copa Argentina (viernes ante Sol de Mayo).

En medio del juego, se volvió a escuchar el insulto a los dirigentes por la baja perfomance. La ilusión de los hinchas de pelear por el torneo, se esfumó rápidamente y el equipo necesita reformarse para ser competitivo.

Ya sin Marco Ruben, el Canalla tendrá que reformular su futuro, con la continuidad o no de algunos futbolistas, y con el crédito acotado que tiene el DT Somoza, la dirigencia tendrá que exhibir soluciones en lo inmediato, en un año electoral que siempre incide.