Un hombre condenado por asesinato, robo y toma de rehenes camina tranquilamente por el centro rosarino, es reconocido y luego de una persecución, el oficial Mauro Mansilla termina asesinado. El hecho ocurrió el martes pasado, pero en las últimas horas se conoció la identidad del, para el fiscal, asesino y sus antecedentes: una condena inconclusa por fuga y diversos hechos delictivos, hasta un asesinato.

¿Cómo se explica que un delincuente esté prófugo durante un año? ¿Cómo se explica que un asesino pueda evadir las salidas transitorias tan fácilmente? ¿Qué hacen los responsables, tanto los Gobiernos de la provincia como de la Nación?

Conclusión le preguntó a algunos rosarinos qué piensan de esta situación y cuál es su visión del accionar de los funcionarios, tanto provinciales como nacionales. «Me parece una vergüenza», sentenció un vecino, quien, como la mayoría de los entrevistados, mostró su indignación. Con respecto a las medidas del Gobierno de Santa Fe y Argentina, los rosarinos cuentan lo que perciben en la calle: «no veo presencia policial, no veo que se hagan cosas en ese sentido», reclamó otro de los consultados.