Un adolescente que estaba con pedido de captura nacional e internacional por el crimen de Brian Aguinaco, el chico de 14 años asesinado luego de haber sido baleado el sábado pasado por “motochorros” en el barrio porteño de Flores, fue detenido hoy por Interpol en Santiago de Chile, informaron fuentes policiales.

El acusado, de 16 años, tiene domicilio en la villa 1-11-14, en la zona del Bajo Flores de esta Capital Federal, y luego del crimen salió del país con la autorización de sus representantes legales.

El subprefecto Bernardino Cárdenas, jefe nacional de Extranjería y Policía Internacional de Chile, informó esta tarde a la prensa que el chico llegó a Santiago el 26 de este mes a las 14.50 en un vuelo de Lan Chile.

De acuerdo al vocero, allí lo estaba esperando su padre, de nacionalidad peruana que había arribado a Chile el 30 de noviembre último.

Cárdenas explicó que este hombre había purgado una condena por “tráfico de drogas” en Argentina y que tiene familiares, también peruanos, que residen hace cinco años en la capital chilena.

Respecto del acusado del crimen de Brian, el jefe policial precisó que ingresó con DNI argentino y pasaporte peruano y que pasó por los domicilios de estos parientes paternos, en uno de los cuales fue finalmente detenido por personal de Interpol.

“El chico ya le había comentado algo, así que (el padre) estaba convencido de lo que había pasado”, indicó Cárdenas y agregó que esta tarde el detenido, a quien se le aplicó la ley de extranjería chilena, fue trasladado vía terrestre hasta el complejo fronterizo Los Horcones, en la ciudad mendocina de Uspallata.

Las fuentes policiales señalaron a Télam que fue recibido a las 19.15 por personal de Gendarmería Nacional y luego puesto en custodia de la Policía Federal Argentina (PFA) en la capital mendocina, desde donde lo trasladarán vía área a la Ciudad de Buenos Aires.

Los voceros estimaron que el arribo será pasada la medianoche, tras el cual, el adolescente quedará alojado en el Centro de Admisión y Derivación (CAD) de la Secretaría Nacional de la Niñez, Adolescencia y Familia, en Perón 2048.

“Sabíamos que se había ido”, dijo esta tarde a la prensa Eduardo De Oto, el abuelo de la hermanastra de Brian, y precisó que este chico quedó vinculado al crimen, entre otras pruebas, a raíz de “reconocimientos fotográficos”.

De Oto contó que ellos sabían que el adolescente apresado “se había ido” de los lugares que solían frecuentar y añadió que el otro sospechoso que permanece prófugo “es mayor” de edad.

“Tranquilo voy a estar cuando mi barrio esté tranquilo. Mi lucha es por mi barrio”, afirmó.

Según las fuentes, la presunta participación de este menor de edad en el hecho está avalada por una serie de testimonios y tareas de inteligencia realizadas por los detectives de la División Homicidios de la PFA y los investigadores judiciales de la Fiscalía Nacional en lo Criminal de Instrucción 35, a cargo de Ignacio Mahiques.

Con los elementos de prueba reunidos, Mahiques pidió la detención de este adolescente al juez de Instrucción 14 porteño, Ricardo Farías, y la declinatoria de la competencia a la Justicia de menores.

La causa ahora está en manos del Juzgado de Menores 7, a cargo del juez Enrique Gustavo Velázquez, quien ahora se encargará de la situación del imputado.

Las fuentes revelaron que la PFA continúa con tareas investigativas para intentar identificar, localizar y detener al segundo “motochorro” que participó del homicidio.

El crimen de Brian fue cometido cerca de las 15 del sábado en la esquina de Rivera Indarte y Asamblea, en el Bajo Flores, a pocas cuadras del acceso a la villa 1-11-14, cuando dos mujeres que iban a pie fueron sorprendidas por dos ladrones en moto, uno de los cuales se bajó armado y las amenazó para que le entreguen sus carteras.

En medio del forcejeo, apareció el auto manejado por Enrique Aguinaco, quien estaba acompañado por su nieto Brian.

De acuerdo a lo que pudo reconstruir la Policía, el hombre encerró con su Renault 19 a los “motochorros” en al menos dos oportunidades con intenciones de evitar que pudieran concretar el arrebato de la cartera.

Sin embargo, los testigos y las dos víctimas del robo dijeron que vieron doblar el auto y los delincuentes dispararon contra el vehículo porque pensaron que los estaban persiguiendo y huyeron al interior de la villa 1-11-14.

Brian recibió un balazo en la cara y fue trasladado por su propio abuelo hasta el Hospital Piñero, desde donde fue derivado al Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, donde agonizó durante dos días hasta que murió el martes.

La muerte de Brian generó marchas y protestas de los vecinos de Flores en la comisaría 38, donde el martes por la noche hubo una serie de incidentes y destrozos en la seccional.

A raíz del caso, el ministro de Justicia y Seguridad porteño, Martín Ocampo, dispuso la remoción de toda la cúpula de la comisaría y se comprometió a reforzar la seguridad en el barrio.

Desenlace fatal: falleció Brian, el chico de 14 años baleado en Flores

Incidentes y destrozos en la comisaría 38ª de Flores tras la muerte de Brian