Durante la jornada del jueves, personal de Policía de Investigaciones (PDI) llevó adelante un allanamiento en la zona de Perdriel al 1700 que culminó con un importante secuestro de autopartes. El procedimiento se realizó con intervención de la Fiscalía de Investigación y Juicio.

Personal de PDI allanó un negocio clandestino de venta de autopartes ubicado en calle Perdriel al 1700. En el lugar, secuestraron más de 500 autopartes, de distintos tipos y modelos de autos, que eran comercializadas de manera clandestina.

Una vez que el personal de PDI irrumpió, notó la presencia de 18 vehículos semidesmantelados, gran cantidad de motores y autopartes. Al consultar al titular del lugar sobre la procedencia de los vehículos y las autopartes, manifestó que adquiría los automóviles a través de distintas compañías de seguro que los remitían junto a las correspondientes bajas, para ser compactados.

El personal se percató de que dichas autopartes no se encontraban con los stickers correspondientes. Así mismo requirieron la habilitación municipal, que tampoco poseía. Por este motivo, se procedió al secuestro de 22 motores de automóviles diferentes marcas, 79 puertas, 21 paragolpes, 65 faros traseros y delanteros, 40 motores limpiaparabrisas, 25 tapas de cilindro, 37 bombas inyectoras, 25 cigüeñales, 28 cajas de cambio, 18 pistones, 5 arañas, 60 burros de arranque, 45 alternadores, 5 torretas, 35 tapas de baúl y 6 trenes traseros.

El titular del lugar fue puesto a disposición de Fiscalía.