El modelo tradicional de la familia, con padres e hijos bajo el mismo techo, quedó atrás en Canadá, donde ahora la mayor parte de los hogares están constituidos por personas que viven solas, según datos del último censo difundidos el miércoles.

En 15 años, la tendencia se ha invertido como resultado de una mayor independencia económica y el envejecimiento de la población.

«Los hogares formados por una sola persona representaron el 28,2% de todos los hogares canadienses en 2016», informó Statistics Canada.

En 2001, la proporción de hogares de una sola persona era de un cuarto mientras que las parejas con niños representaban el 31,5%.

Ahora éstos últimos constituyen el 26,5% de los 14,1 millones de hogares canadienses.

Según los sociólogos, este cambio se explica por «una serie de factores sociales, económicos y demográficos».

«La redistribución de los ingresos, las jubilaciones y el aumento de las mujeres en el mercado laboral» han permitido que más gente sea «económicamente independiente».

Por otra parte, la proporción de personas solteras aumentó por el crecimiento de separaciones o divorcios, o por el «envejecimiento de la población» debido a la expectativa de vida más alta, según la información de Statistique Canadá.