“La actitud de la cadena de supermercados Coto, en complicidad con la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), demuestra una vez más la perversidad puesta de manifiesto en la audiencia de esta mañana, al ratificar que van a despedir a compañeros trabajadores, con una causa totalmente inventada”. Así lo expresó nuestro secretario gremial de Empleados de Comercio, Juan Gómez, al término de la audiencia convocada en la mañana de hoy por el Ministerio de Trabajo de la provincia. La empresa de supermercados durante la reunión ratificó los despidos producidos días antes de entrar en vigencia la Ley 13.441 de Descanso Dominical, en el marco de la conciliación obligatoria que había dispuesto el ministerio de Trabajo, y que finaliza a las doce de la noche de este viernes 5 de agosto.

“Este supermercado despide a nuestros compañeros invocando el artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo (empresas en crisis), lo cual es una mentira flagrante y no podrá demostrar porque cada día venden más y sus ganancias son cada vez más exorbitantes”, comentó Gómez.

«Pretenden justificar los despidos»

Agregó Gómez que “a los compañeros se les prohíbe trabajar horas extras pese a que los mismos no dan abasto con sus tareas. Lo hacen para tratar de justificar los despidos, que no tienen ninguna justificación”. El secretario gremial fue contundente también al afirmar que “esta perversidad de Coto atenta contra la paz social ya que quieren imponer sus propias leyes desconociendo tanto al Gobierno provincial y a la Legislatura, como al Concejo Municipal de Rosario. Mientras en nuestra provincia de Santa Fe no acatan la Ley 13.441, que regula horario de apertura y cierre de los comercios y los feriados nacionales, en Buenos Aires, y por decisión propia, hay 20 sucursales de Coto que cierran los días domingos”.

Más adelante, nuestro secretario gremial dijo que “lo de Coto no es nuevo ya que desde que en Santa Fe se promulgó la antes citada ley, a través de sus matones pretendió avasallar a las instituciones de la Democracia, con la cual no se siente muy a gusto y seguramente añora épocas tremendas y difíciles como las que pasamos los argentinos tras el golpe de 1976.

“Y siguen insistiendo en distintos ámbitos de la Justicia, presentando amparo tras amparo, pero sólo han conseguido que sean rechazados una y otra vez tanto en el fuero provincial como en el fuero federal”, afirmó Gómez.