Por Aldo Battisacco, desde Buenos Aires (Enviado especial)
Mientras sobrevolaba este martes la firma del dictamen en comisiones del régimen de Participación Publico Privada -que permitió su tratamiento y aprobación en el la sesión de este miércoles- Felipe Solá se retiró del Anexo de diputados visiblemente preocupado. El legislador se limitó a decir a este medio antes de tomar las escaleras, en forma respetuosa, que no daría declaraciones a la prensa porque se encontraba urgido de atender otras situaciones. Inmediatamente balbuceó que no le «correspondía» a él «hacerlo».
A pesar de este imperceptible acontecimiento, ya había indicios de que esto no era nuevo. Hace pocos meses estas discrepancias internas se hicieron sentir por parte de Solá en algunos programas televisivos donde participó y en los cuales le pidió al máximo referente del Frente Renovador, Sergio Massa, que defina la actitud que tomaría frente a las medidas del macrismo; la última fue la ley de Participación Público Privada que fue acompañada por su bloque y con la que mostró desde los inicios profundas diferencias políticas, hecho que lo llevó a ausentarse durante la votación de este miércoles en el recinto de la Cámara.
Otra evidencia, no propalada públicamente, está centrada en la reciente alianza que conformó el ex intendente de Tigre con la líder del GEN, Margarita Stolbizer, por su posicionamiento respecto del peronismo.
Minutos después, llegó el turno del gremialista y diputado del Frente Renovador Facundo Moyano, quien con tono grave respondió algunas preguntas que Conclusión le formuló acerca de su impresión de lo que aconteció en la comisión. Moyano consideró que «la iniciativa tuvo un debate bastante profundo, pero sin que el contenido y el espíritu del proyecto que es facilitarle condiciones y garantías al inversor extranjero se modifique».
«Esa es la esencia y la desventaja en la que el Gobierno nacional pretende dejar al Estado argentino, por lo tanto si no se modifican estas condiciones, no voy a acompañar desde mi lugar este tipo de leyes», seguidamente sostuvo el gremialista que lo hace porque es un «legislador independiente con pensamiento propio más allá de pertenecer a una estructura gremial y porque por la parte política hay una trayectoria legislativa donde se expresó una contradicción en relación a mis ideales vote a consustanciado con estos», precisó el legislador.
«Se hizo mucho con voluntad de construir, y se aportaron mejoras, más allá de lo que mando el Ejecutivo, porque por la necesidad política y económica de inversiones directamente el Estado resignó todo para darle garantías a los privados, y por esto no voy a votar este proyecto», sentenció el legislador.
En la sesión que aprobó este régimen de contratación, Facundo Moyano, junto a los diputados de origen sindical Omar Plaini (Cultura, Educación y Trabajo), Jorge Taboada (Chubut Somos Todos) y el massista Héctor Daer, se abstuvieron de votar la ley, a pesar que el dirigente de las Sanidad había estado reunido el martes por la mañana negociando con las autoridades de la Cámara baja el cupo de componentes y la participación de la industria en la ley que que esta noche obtuvo media sanción.
