Por Ariana Robles
Sacar una sonrisa, armar una organización solidaria, dar contención a través del arte. Todo con un mismo fin: mejorar la calidad de vida de los más chiquitos que se encuentran hospitalizados.
Bajo esta consigna, la artista plástica, Elizabeth Aguillón, junto con otros voluntarios se presenta en diferentes hospitales públicos del país para acompañar el trabajo de la medicina.
Fue así como surgió “Arte que ayuda a Curar”, una organización sin fines de lucro, que se fundó en la ciudad de Rosario, en marzo de 2014 y tiene como objetivo principal poner a disposición de la salud, todos los recursos artísticos posibles, a fin de convertirse en una herramienta más, para lograr la humanización de los espacios pediátricos recreando la magia que tienen los niños.
“La agrupación nació después de una enfermedad que tuvo mi hija, quien estuvo internada, y a partir de allí, me di cuenta que estaba en un lugar muy despojado de todo lo que era la infancia”, señaló Elizabeth, creadora de la organización, en diálogo con Conclusión. “Los chicos no dejan de ser chicos estando enfermos, por eso me propuse crear un poco de esa magia que ellos tienen, así empecé a transitar esto hasta que tuve la primera posibilidad”, agregó.
«Los chicos no dejan de ser chicos estando enfermos»
Así, utilizando el arte, la inspiradora de esta iniciativa, realizó su primera intervención en el Hospital de Niños Zona Norte, donando su tiempo y sus ganas para ayudar en la recuperación de los más chicos: “Quería mostrar una transformación del espacio en general; el muralismo fue creado para eso, para revolucionar algo, no era para decorar, quería transformar espacios”, contó.
De esta manera en estos años, y junto a sus compañeros de pinceladas, Aguillón llegó a distintos hospitales del país, donde transformaron en sitios alegres y coloridos llenos de estridentes figuras animadas, los pasillos blancos y largos de las salas de Pediatría y las unidades de terapia intensiva.
“Viajamos a Santiago, al Chaco, a Mendoza y estamos con un proyecto de viajar a Ushuaia; se ha convertido en un proyecto federal. Ahora lo piden en todos los lugares, porque a diferencia de otros espacios como en el Garrahan, donde se realizan ploteos, nosotros trabajamos con otras intervenciones y además buscamos involucrar a la sociedad”, contó a Conclusión la artista plástica.
“Empecé también a hacer convocatorias para generar conciencia y para fomentar este sentido de pertenencia y así cuidar los espacios”, añadió Elizabeth.
Sanar expresándose
La artista dijo que «los estudios demostraron que la luz y el color influyen en las personas provocando reacciones en su estado físico y emocional”. “Con esto tratamos de que los chicos estén más 
contenidos, que las figuras los distraigan y así se facilite también la tarea de enfermeros y médicos», comentó.
“El diseño es muy cálido y también el lenguaje es muy claro para que se identifiquen. Los rasgos de los dibujos también son simples, tratamos de
hablar el mismo lenguaje”, agregó.
De esta manera, castillos, jirafas, extraterrestres, flores, soles y otras figuras son los dibujos que le ganan la batalla visual al ambiente frío del hospital, con el deseo de acompañar los tratamientos y la pronta recuperación de los chicos.
«Sabemos que la medicina es diagnóstico y tratamiento, todo esto es una herramienta que acompaña el proceso de la cura, porque una persona cuando está mejor contenida puede tener una recuperación más rápida», aseguró.
Asimismo, el equipo de profesionales avala el trabajo, sosteniendo que hace falta un cambio en los ámbitos de salud, que tenga en cuenta de que “el niño no deja de ser niño cuando va a curarse”.
«Es una herramienta que acompaña el proceso de la cura»
Reinauguración en el Vilela
Este miércoles por la mañana se llevó a cabo la inauguración de las obras de readecuación de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos del Hospital de Niños «Víctor J. Vilela”, donde estuvieron presentes la intendenta Mónica Fein, el Secretario de Salud Leonardo Caruana y el presidente de la Fundación de la Ciudad de Rosario Guillermo Laino.
De esta forma, se inauguró la Primera Sala de Terapia Intensiva Pediátrica Humanizada del país, con murales acompañados de cálidos colores que se realizaron gracias a la intervención artística de la agrupación Arte que Ayuda a Curar. 
Para la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos se pensó un diseño que acompañe y que tranquilice a través de tonos pasteles, tanto a pacientes, familiares y profesionales, teniendo como premisa la influencia que tienen los colores en el ser humano, incidiendo sobre su comportamiento y estado de ánimo.
Como colaborar
La actividad que realizan es totalmente gratuita y autosustentable, y para comprar los materiales venden remeras, imanes y prendedores, con la idea que el proyecto se contagie. “No pedimos dinero, sino materiales para poder realizar las pinturas, pinceles, escaleras, de esa manera se puede ayudar”.
Quienes deseen contactarlos pueden hacerlo a través de su correo artequeayudaacurar@gmail.com o mediante Facebook en «Arte que ayuda a curar».
