Las negociaciones en búsqueda de la unidad de la CGT Rosario continúan. Si bien la definición del titular de La Bancaria, Matías Layus, de postularse como secretario general ya está definida, hay otros sectores del movimiento obrero que siguen indecisos entre un consejo directivo o un triunvirato que dirija la central obrera a nivel local.

En diálogo con Conclusión, el referente del gremio de los bancarios e integrante del Movimiento Sindical Rosarino manifestó que en función de las diferencias existentes dentro del movimiento obrero, «se decidió postergar hasta nueva fecha la realización del plenario que estaba pautado para mañana en la sede de la UOM Rosario».

«No hay una fecha cierta todavía. Desde el Movimiento Sindical Rosarino tuvimos ayer una importante reunión con más de treinta organizaciones sindicales donde decidimos aceptar esta postergación bregando siempre por la unidad del movimiento obrero y planteando concretamente que pretendemos conducir una CGT que tenga un perfil definido con respecto al posicionamiento en oposición al modelo económico del gobierno nacional. Si bien somos respetuosos no estamos de acuerdo porque perjudica directamente al trabajador», describió Layus.

Las diferencias dentro del movimiento obrero se basan, según el dirigente, en que aún «no hay consenso en cuanto a la forma de conducción», es decir, si a la CGT Rosario la dirigirá un triunvirato o una conducción unificada.

«Nuestra premisa siempre pasó por sostener la figura de un secretario general y en ese esquema vamos a persistir y sobre todo, por lo realizado en los últimos siete años, sostenemos que tenemos la legitimidad de conducir la nueva CGT Rosario. Yo, soy el secretario general del Movimiento Sindical Rosarino y dentro de él, tengo el consenso necesario como para ser candidato a ocupar el cargo de secretario general de la nueva CGT», enfatizó Layus en diálogo con Conclusión.

Según el representante de los bancarios, la nueva fecha de plenario dependerá de las negociaciones que se establezcan en los próximos días y las reuniones entre los gremios. «Nosotros buscamos reunirnos con todos los sectores y dejar en claro el fondo de la cuestión que tiene que ver con el perfil unificado de la CGT, que esté en sintonía con lo que expresa el Movimiento Sindical Rosarino cada vez que sale a la calle, fundamentalmente opositor al modelo económico», reiteró.

Por su parte, el titular del sindicato de Luz y Fuerza, Alberto Botto, manifestó que lo que ellos ansían desde hace tiempo es la unidad de todo el movimiento obrero para «organizarse y empezar a resistir seriamente las políticas de ajustes que avanzan día a día sobre los derechos de los trabajadores».

«Hubiésemos preferido que se logre la unidad pero esta postergación va a servir para encausar las negociaciones y poder lograr una unificación real y dejar en claro, sobre todo, el modelo sindical que pretendemos; activo, en defensa clara del derecho de los trabajadores y sin condicionamientos para los sindicatos», resaltó Botto.

El dirigente reiteró su crítica a la forma de actuar del triunvirato que lidera la CGT a nivel nacional y sostuvo que «los hechos en sí mismos han dejado a la luz que no era lo que los trabajadores esperaban». Por lo tanto, consideró que lo mejor «que les podría pasar a nivel local es que exista un solo secretario general y la estructura que lo acompañe». «Sabemos que no va a ser fácil, pero desde el Movimiento Sindical Rosarino tenemos la mesa consolidada y hemos elegido al compañero Matías Layus para la dirigencia y en eso no tenemos ningún tipo de dudas», remarcó.

Por último aseveró: «Tenemos que hacer visible nuestro enojo. En nuestra región hay cientos de suspensiones que se convertirán en despidos, las exportaciones se abren indiscriminadamente y esto va en detrimento directo de las industrias del sector. Así, nuestros compañeros de la UOM afirman que esperan tener 200 despidos más de acá a fin de año».