Tras los violentos choques entre cooperativistas mineros que bloquean rutas de Bolivia por segundo día en rechazo a los cambios en la ley del sector, más de 40 policías tomados de rehenes fueron liberados después de que se levantaron cargos judiciales contra unas 50 personas que cortaban vías, mientras los directivos de la Fencomin, entidad que agrupa al sector, llamaron al diálogo al gobierno, pero manteniendo las protestas en las carreteras.

El ministro de Gobierno (Interior), Carlos Romero, reportó que existen varios puntos de bloqueo en la carretera La Paz-Oruro- Cochabamba, y censuró la violencia de la protesta de miembros de la Federación Nacional de Cooperativas Mineras de Bolivia (Fencomin) contra policías que ayer intentaron sin éxito el desbloqueo de la única carretera en pleno altiplano.

El enfrentamiento entre mineros y policías se produjo en el poblado de Mantecani, a 100 kilómetros al sur de La Paz, donde varios uniformados fueron heridos y varias decenas tomados como rehenes por varias horas.

Los policías fueron liberados después que se levantaron cargos judiciales contra unos 50 mineros por el bloqueo de carreteras.

«El trasfondo de esta protesta con actitudes violentas es chantajear al gobierno y modificar la Ley de Minería (para permitir asociación con empresarios nacionales o extranjeros)», precisó Romero.

Por su parte, el vicepresidente de la Confederación Nacional de Cooperativas de Bolivia, Albino García, lamentó la violenta protesta, pero ratificó que las cooperativas mineras piden la modificación del artículo 37 de la Ley de Cooperativas que permite la conformación de sindicatos.

«Honestamente no queremos permitir ninguna sindicalización en nuestro sector cooperativo», agregó.

En cambio, el ministro afirmó que “quieren vivir cobrando una renta sin trabajar, sin hacer nada, y vivir de la renta por alquilar sus cooperativistas a trasnacionales” que se beneficiarían con el régimen impositivo que tiene el sector.

Romero informó que más de 5.200 cooperativistas mineros se encuentran «fuertemente armados» con explosivos, dinamitas, mechas expansivas, perdigones bloqueando las carreteras del país.

«De acuerdo con el informe de Inteligencia de la Policía en la serranía de Sayari hay policías que intentan despejar (las rutas) con maquinaria pero los cooperativistas mineros amenazan con un fusil máuser desde la serranía», mencionó.

En tanto, el vicepresidente de la Fencomin, Agustín Choque, pidió hoy al gobierno que los convoque de manera inmediata para entablar el diálogo y resolver las demandas del sector, pero sin levantar los 15 puntos de bloqueo que tienen instalados en las distintas regiones del país.

El dirigente explicó que los cooperativistas mineros están dispuestos a ir donde el gobierno del presidente Evo Morales fije el punto de encuentro, pero advirtió que en estos momentos «es difícil» levantar los bloqueos antes de iniciar el diálogo.

«El sector cooperativo, en este momento, pedimos el diálogo que se instale, a la hora que nos llamen, pero tiene que ser ya, de parte del gobierno; donde nos indiquen vamos a ir a conversar. Es difícil de desmovilizar en este momento que están en los sectores de bloqueo», remarcó en conferencia de prensa.

Según Choque, la última invitación que recibieron del gobierno para dialogar «es chantajista» porque condiciona el diálogo a primero levantar los bloqueos, lo que es muy difícil de cumplir en estos momentos. «En este momento es difícil levantar el bloqueo», insistió.

Por otro lado, negó que los cooperativistas busquen otorgar áreas mineras a empresas trasnacionales, porque -dijo- «es imposible» que compañías extranjeras quieran invertir en dos o tres cuadrículas de explotación minera, que es el área que poseen sus afiliados, en general pequeños propietarios mineros.

Varios jefes policiales de La Paz, Oruro y Cochabamba informaron a los medios de al menos treinta agentes fueron heridos por golpes de los manifestantes.

En los tres lugares, los manifestantes usaron dinamita para enfrentar a la Policía y en Cochabamba dinamitaron partes de un cerro para sacar rocas con las que cortaron una carretera.

El Ejecutivo no precisó el número de agentes que fueron tomados como rehenes, pero uno de los dirigentes de la Fecomin, Hernán Montero, dijo en La Paz que son 46, aunque no sabe si son oficiales o de la tropa policial.

Montero agregó en declaraciones al canal Cadena A que la Policía detuvo a 45 mineros en la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, otros 30 en la localidad de Patacamaya y 38 en Cochabamba.

Aseguró que entre los mineros también hay lesionados con golpes y que incluso alguno fue herido de bala, lo cual fue negado por el gobierno.

Las cooperativas mineras, que aseguran contar con 150.000 afiliados, siempre fueron cuestionadas porque tienen socios que son patrones capitalistas y otros trabajadores subcontratados cuyos derechos son vulnerados, según las investigaciones sobre el sector.