Obras sociales y firmas de medicina prepaga en el ojo de la tormenta. Desde la Asociación de Transportistas Especiales de Santa Fe (Atraes) reclaman pagos adeudados de más de seis meses de atraso y presentan gran preocupación porque tras presentar varios reclamos, aún no tienen respuestas.

“No hay registro de que puedan solucionar este problema, muy por el contrario, se incrementan los meses”, expresó Pablo Bolego, presidente de Atraes al tiempo que aclaró que todas las obras sociales (Pami incluido), y firmas de medicina prepaga, utilizan el servicio de transporte y todas se encuentran en la misma situación de endeudamiento.

En Rosario y zona son unos 300 trabajadores con licencias para ejercer en el rubro y este atraso, que es el ingreso para los conductores, hace que se vea “notablemente deteriorado el servicio”, asumió el presidente de Atraes.

“El hecho de que veamos cómo se corta toda la cadena de pagos pone en alerta a todo el sector ya que vemos compañeros con dificultades para enfrentar los costos del servicio. Ni hablar de aquellos que por antigüedad deben renovar sus unidades. Podemos sentir a diario el desánimo de los compañeros que a veces no tienen ni para combustible”, lanzó Bolego.

Recordemos que el sector recibió recientemente un aumento del arancel de un 25% en dos veces a terminar de pagar en marzo próximo. Ahora, “si siguen con estos serios retrasos en los pagos el aumento se termina evaporando con la inflación que se mantiene”, se quejó Bolego y recordó que el retraso permitirá cobrar el logrado aumento del último 12,5% de marzo, recién para septiembre del 2017 y argumentó que para enero de 2017 el gobierno prevé un nuevo aumento del combustible que rondaría el 8%.

Por lo pronto, desde Atraes han difundido que han acercado varios reclamos, y pedidos de entrevista a las autoridades de Pami y ninguno fue contestado, “es más, hasta hemos recibido mala atención desde la institución de los jubilados diciéndonos que no molestemos más con cartas”, se sinceró Bolego.

Concretamente, “la situación es extrema. Se juega con la vida de los pacientes y hacen que el sistema se debilite”, alertó el presidente de Atraes y advirtió que seguirán con los reclamos “hasta encontrar respuestas”.