Un hombre invocó a Alá, acuchilló e hirió ayer a ocho personas en un grupo de personas en un centro comercial de la ciudad estadounidense de Minnesota, en un ataque poco claro, que 24 horas después fue reivindicado por la milicia radical Estado Islámico (EI).

Las autoridades no difundieron la identidad del atacante, que murió a manos de los policías que llegaron al lugar, pero sí contaron que antes de acuchillar a cada una de sus víctimas les preguntaba si eran musulmanes, según contó el jefe de la fuerza local, Blair Anderson, en una conferencia de prensa, citada por la agencia de noticias EFE.

El atacante entró al centro comercial vestido con el uniforme de una empresa de seguridad privada y tras acuchillar a ocho personas, fue acribillado por un policía de otro distrito que se encontraba allí de civil.

De los ocho heridos, sólo uno tuvo que quedar internado en el hospital más cercano.

Anderson no quiso hablar de terrorismo ni de posibles vínculos con milicias u organizaciones islamistas internacionales.

«Vamos a ser diligentes y llegar al fondo de esto», aclaró.

El ataque en la pequeña localidad de Saint Cloud, a unos 100 kilómetros al noroeste de Mineapolis, la principal ciudad del estado de Minnesota, en el norte del país, pasó relativamente inadvertido para la prensa nacional e internacional, hasta que la agencia de noticias vinculada al EI, Amaq, informó que el atacante era «un soldado del califato», como suele llamar a los milicianos de ese grupo.

Según la agencia, el hombre lanzó ese ataque en el centro comercial «en respuesta a las llamadas a atentar contra los ciudadanos de los países pertenecientes a la coalición cruzada», en referencia a la coalición internacional encabezada por Estados Unidos que desde hace dos años bombardea desde el aire y ayuda desde la tierra a combatir el EI en Siria e Irak, los dos bastiones de la milicia.

Como ya ha sucedido en otros casos similares, nada indica que el atacante haya tenido un contacto directo, mucho menos entrenamiento o adoctrinamiento real, con la milicia que nació y se hizo fuerte en Medio Oriente.

Según la Policía, el atacante sólo había sido fichado con anterioridad por infracciones de tránsito.

Mientras las autoridades locales y de Minnesota han reaccionado con cautela, el ataque coincidió con la explosión de una aparente bomba en el corazón de Manhattan, que dejó 29 heridos, y de otra explosión en la localidad de Seaside Park, en el estado de Nueva Jersey, que no causó víctimas ni daños materiales graves.

Los tres hechos coinciden además con la víspera de la llegada de decenas de líderes mundiales y cientos de diplomáticos, que participarán esta semana de una nueva Asamblea General de la ONU, la principal cita anual de la organización en Nueva York.