En un mensaje por el inicio de la Semana Santa, el presidente de la comisión episcopal de Pastoral Social, Jorge Lugones, aseguró hoy que «es tiempo de cercanía espiritual pese al distanciamiento físico que nos impone la cuarentena».

El obispo de Lomas de Zamora introdujo su misiva con un «mensaje de esperanza», indicando que en el actual contexto de propagación de la pandemia de coronavirus «es tiempo de hermandad, de solidaridad, de unidad como Nación».

«Un tiempo que nos pone a prueba como un Pueblo que se cuida y se protege. Es tiempo de cercanía espiritual pese al distanciamiento físico que nos impone la cuarentena, porque es una distancia de protección, de amor y cuidado por nosotros y por todos», resaltó.

Para el religioso, «más que nunca es necesario mirar al otro, y en especial al que más lo necesita, al desamparado, al solitario, al anciano, al que necesita cuidado», así como «a quienes nos cuidan».

Monseñor Lugones lamentó que a la emergencia alimentaria y social que amplios sectores de la sociedad ya sufrían antes de la pandemia, se sumó la emergencia sanitaria».

«Por eso, desde la Pastoral Social, alentamos especialmente a tantos agentes comprometidos con el cuidado social que en todos los rincones del país están trabajando para ayudar a los más necesitados», afirmó, con especial mención a los trabajadores de la salud y de las fuerzas de seguridad.

Finalmente, en este tiempo de tantas dificultades, apelamos a que entre todos, demos los pasos necesarios para conservar y promover la paz y la solidaridad social, en resguardo especialmente de los más pobres y de todos aquellos que descubren a Dios cuidando a los más vulnerables y necesitados», finalizó el obispo.