Ante una Catedral colmada de fieles, el padre Pedro Opeka celebró el domingo una misa en Mar del Plata. «La pobreza se combate con trabajo, justicia, verdad y disciplina», dijo en una entrevista con Telediario, el noticiero de Canal Diez.

«Un país que se respeta tiene que tener una ayuda social para las familias carenciadas. El Estado tiene que ayudar», afirmó el padre Opeka, argentino y candidato al Premio Nobel de la Paz por su labor como misionero en Madagascar, donde ayudó a más de medio millón de personas a salir del basural en el que vivían.

Desde los años 70, el padre Pedro Opeka viene dando una dura batalla contra la pobreza africana, en especial en Madagascar, donde a través de su asociación Akamasoa lleva levantados cinco pueblos donde ya viven veinte mil personas. Sobre la pobreza en la Argentina, sostuvo: «La base está en la educación».

Opeka es crítico del asistencialismo. “Tiene que haber una ayuda del Estado para los casos difíciles como las madres solas con muchos hijos o a los discapacitados. Hay que ayudar, pero no asistir. Yo le digo a mi gente de Madagascar: ‘¡No quiero asistirlos!’ Porque asistir a una persona que puede trabajar es hacerla dependiente y esa persona nunca va a ser una persona en serio”, expresó.