La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) encargó una encuesta sobre su imagen con el objetivo de acercarse a sus fieles, mejorar su comunicación e incrementar el nivel de donaciones a través de medios tecnológicos, que, entre sus principales conclusiones, reflejó la demanda de una Iglesia «más abierta, inclusiva y tolerante».

Además, anunció que se profundizará la creación de equipos dedicados a la recaudación de fondos «para mostrar cómo se usa el dinero de las donaciones, para llevar transparencia», y que se impulsará la creación de herramientas para posibilitar las donaciones online.

Así se desprende de un informe encargado a la consultora Voices, cuyas conclusiones fueron presentadas públicamente este martes por monseñor Oscar Ojea, presidente del Episcopado, y monseñor Guillermo Caride, titular de la Comisión Episcopal para el Sostenimiento de la Acción Evangelizadora de la Iglesia.

El estudio -que determinó fortalezas y debilidades de la percepción social sobre la Iglesia Católica en la Argentina- exhibió opiniones divididas sobre la imagen de la Iglesia: el 48% de los consultados dijo tener una imagen positiva, el 44% una imagen negativa y un 8% no contestó.

No obstante, entre los consultados hubo unanimidad en pedir una Iglesia «más abierta, inclusiva y tolerante, más moderna y proactiva, más coherente con sus prácticas y más participativa».

«Como Iglesia estamos ante un desafío de comunicar mejor, de estar más cerca y más presentes para nuestros fieles», explicó Caride en la presentación de los resultados de la encuesta, que se realizó esta mañana en la sede del Episcopado, ubicada en la calle Suipacha al 1000 de la Ciudad de Buenos Aires.

En ese marco, anunció que se profundizará la creación en las distintas diócesis de equipos dedicados a la recaudación de fondos y que, también, se pondrá en marcha una página web para que los interesados puedan donar dinero a la Iglesia Católica de la Argentina, e, incluso, que se puedan hacer donaciones de manera electrónica, a través de los celulares, durante las misas.

«La Iglesia está en los barrios, en los centros de recuperación de adictos, entre los enfermos terminales, en las cárceles, en el mundo de la discapacidad. Esta presencia no está sometida a trampas ideológicas y es una tarea de caridad permanente», dijo, por su parte, monseñor Ojea.

Es que la encuesta marcó como uno de sus resultados el bajo conocimiento de la comunidad respecto de la tarea que desarrollan los sacerdotes.

En relación a la encuesta, que fue presentada por parte de la consultora Voices por Constanza Cilley, se determinó -entre otros resultados- que seis de cada diez argentinos no está familiarizado con el trabajo que realiza la Iglesia Católica.

El relevamiento -realizado entre 2790 casos online y 28 focus group presenciales- también arrojó como conclusión que los roles de la Iglesia deberían ser «predicar y evangelizar, educar y guiar, brindar contención espiritual y emocional, y brindar ayuda material».

A partir de estas prioridades, los encuestados señalaron la necesidad de «una mayor salida y apertura al exterior y captación de fieles, adaptarse a los cambios sociales y valores de época, ser más inclusiva, contenedora y participativa y generar una mayor comunicación de sus acciones y transparencia».

Como cuestionamiento a la institución eclesiástica, la mitad de los consultados estimaron que «los principales beneficiarios del trabajo de la Iglesia son los religiosos», y la mayoría cree que «la Iglesia no experimentó cambios o que estos no son suficientes», apuntando a «visiones dogmáticas, misas tradicionales, denuncias de abusos sexuales por parte de sacerdotes o escasa salida hacia el exterior».

Otro capítulo de la encuesta apuntó a relevar cuál es la percepción social respecto de la financiación de la Iglesia y la predisposición de la sociedad a aumentar el nivel de donaciones.

En este sentido, el 35% consideró que la Iglesia «no necesita dinero» y, al ser consultados sobre las fuentes de financiamiento de la Iglesia, el 44% mencionó al Estado, el 27% a los fieles y el 12% al Vaticano.

Asimismo, ante la pregunta de cuál debería ser el método de financiarse de la Iglesia, los entrevistados dijeron que «el Vaticano» (59%), los «fieles» (42%) y el Estado (17%).

Ante la consulta de por qué donaría dinero a la Iglesia Católica, un 43% de los encuestados dijo que lo haría para «ayudar a los más necesitados», y un 28% para «colaborar con el mantenimiento de las Iglesias».

Como contracara, entre los motivos para no donar a la Iglesia, se ubicó la «desconfianza», con un 25% de respuestas, la falta de dinero (15%) y por considerar que el Vaticano debería aportar esos fondos (13%).