El papa Francisco se reunió este sábado con el embajador ucraniano ante el Vaticano, Andrei Yurash, mientras la Santa Sede trabaja en una posible visita del Pontífice a Kiev.
El encuentro se dio a dos s¡emanas de que el Papa planteara que mantiene su «deseo» de ir a Kiev, aunque sabe que es un viaje «complicado», en el que la Santa Sede «está trabajando», según dijo a fines de julio a periodistas que lo acompañaron en su gira a Canadá.
Francisco tiene confirmada por el momento una visita a Kazajistán, del 13 al 15 de septiembre, para participar de un encuentro interreligioso, en un viaje con el que podría sobrevolar Ucrania en el vuelo de 6 horas y media que hará para recorrer los 5.262 kilómetros que separan Roma de la capital Nur-Sultán.
En ese marco, tras la reunión, el embajador ucraniano publicó en Twitter que el Papa se mostró «muy cercano a Ucrania».
«Quiero expresar esta cercanía con mi visita a Ucrania», fueron las «palabras importantes» del pontífice, según Yurash.
«Desde hace muchos años, y especialmente desde el comienzo de la guerra, Ucrania espera al Papa y estará feliz de saludarlo antes de su viaje a Kazajstán», agregó el representante diplomático de Kiev.
