Curas del movimiento villero se reunieron con el ministro de Educación de la Nación, Jaime Perczyk, con el objetivo de articular acciones para que los estudiantes que se desvincularon de la escuela durante la pandemia regresen y terminen sus clases, en el marco del programa de fortalecimiento de enseñanza “Volvé a la escuela”.
La comitiva de religiosos estuvo integrada por los sacerdotes José María Di Paola, más conocido como el “padre Pepe”, Carlos “Charly” Olivera, Lorenzo “Toto” de Vedia y Nicolás “Tano” Angelotti, quienes se reunieron con el funcionario nacional en el Palacio Pizzurno.
Durante el encuentro, acordaron la construcción de acuerdos para garantizar la presencialidad plena, recuperar contenidos y reforzar aprendizajes, principalmente en los barrios populares del país, según indicó en un comunicado la cartera educativa.
Perczyk destacó el trabajo territorial que desarrollan los curas villeros, con quienes ya trabajó en otro momento y afirmó: “Hoy empezamos a construir acuerdos juntos para que todas las pibas y todos los pibes vayan a la escuela”.
Además, subrayó que el trabajo conjunto tiene como meta “mejorar la posibilidad de integración de todas y todos y que haya más posibilidades para que las y los jóvenes vayan a la escuela secundaria y la terminen”.
“Los curas villeros son un ejemplo de testimonio, compromiso, esfuerzo y valentía”, finalizó el titular de Educación.
Por su parte, el padre Pepe manifestó que le señalaron al ministro “la realidad que vivimos en los barrios populares, cómo estamos trabajando en educación, cuáles son los desafíos que tenemos y cómo podemos ayudar en este momento de la pospandemia”.
“Nos ponemos a disposición de Jaime para aquellas cosas en donde nuestras capillas, clubes y colegios también pueden aportar”, sostuvo.
La Federación Familia Grande Hogar de Cristo, coordinada por el padre Pepe, es una red de más de 200 centros barriales que ayuda a personas en situación de vulnerabilidad por causas sociales y adicciones a sustancias psicoactivas.
Estos centros se caracterizan por ofrecer una inserción territorial y libertad de acción como alternativa terapéutica.
