Según contó el periodista Roberto García, por Canal 26, la propia Zulemita Menem habría llamado furiosa a Juliana Awada, de quien fuera amiga, al suponer que Mauricio Macri impulsó la causa contra su padre en la Cámara Nacional Electoral, lo cual ocurrió dos semanas después de la decisión de la Cámara de Diputados de trabar el proyecto de expulsión de Julio de Vido, procesado por varias causas, cuando el propio Macri no fue preso gracias a la Corte de Julio Nazareno.

Ello ocurrió un 8 de agosto pero de 2002.

Lo de Zulemita se entrelaza con la familia Menem, no disimula el enojo tras la decisión de la Cámara Electoral de dejar fuera al expresidente Carlos Menem de los comicios, tras impugnar su postulación a sólo 6 días de las Paso y luego de que el fiscal Jorge Di Lello avalara su candidatura a senador nacional.

Presuntas irregularidades en Sevel

Pero todo comenzó en 1993, cuando la Justicia investigó presuntas irregularidades en las exportaciones de la Sociedad Europea de Vehículos en Latinoamérica (Sevel), firma que Mauricio Macri conducía junto a su padre Franco. El caso tuvo repercusiones en 1999, cuando el juez Guillermo Tiscornia procesó a su padre, presidente de la firma, pero le dictó falta de mérito al ahora presidente de la Nación.

La Justicia sospechó que la sucursal argentina de Sevel cobraba reintegros por exportaciones a su filial uruguaya. Sostenían que las piezas vendidas eran ensambladas en Uruguay y luego importadas a la Argentina en forma de automóviles terminados. De este modo, presumían que la compañía cobraba reembolsos por exportaciones y realizaba las importaciones con un arancel diferencial del 2%.

Macri defendió su inocencia: «Lo único que hice fue seguir los pasos que me dijo la Aduana. Si alguien fija las reglas y las cumplís, no veo por qué estoy involucrado», sostuvo entonces.

Suspenden a Tiscornia

Ocho meses después, en marzo de 2000, el primer juez a cargo del «caso Macri» cayó en desgracia: Tiscornia fue suspendido por presunto mal desempeño (luego fue absuelto por el Senado). Entonces, en febrero de 2001, el juez Carlos Liporace se hizo cargo de la causay convirtió la falta de mérito en procesamiento contra Mauricio Macripor contrabando agravado.

Apenas conoció el fallo, Macri acusó una «conspiración» en su contra. «En este país no van presos ni drogadictos ni delincuentes y se la agarran con uno. No quiero pensar en un supuesto complot contra mi figura o la de mi padre, aunque en la Argentina estamos muy acostumbrados a estas cosas», aseguró entonces el ahora presidente de la Nación.

Finalmente, con fallos y apelaciones de por medio, el caso llegó a la Corte Suprema. El máximo tribunal absolvió a Franco y a Mauricio.

Pero luego llegó Néstor Kirchner, quien apenas asumió, avanzó contra la «mayoría automática» en la Corte por la cercanía de algunos de sus miembros con el menemismo.

Mal desempeño

Los ministros del máximo tribunal que habían absuelto a Macri fueron acusados por la mayoría de la Cámara de Diputados en el juicio político que se les inició por mal desempeño. Una de las cinco causas que enfrentaron los magistrados fue «el caso Macri».

La comisión de Juicio Político de la cámara Baja los acusó por «obstruir el debido proceso legal» de la causa y por cometer «un grave perjuicio contra el Estado al dejar de percibir los debidos tributos aduaneros».

Desde aquel momento, cinco jueces abandonaron el tribunal. Expulsados por la presión política renunciaron Julio Nazareno, Guillermo López y Adolfo Vázquez. El Senado destituyó a Eduardo MolinéO´Connor y a Antonio Boggiano, pero la «causa Macri» fue desestimada.

No toda la Corte incurrió en el prevaricato: Fayt y Belluscio emitieron un fallo minoritario en disidencia, donde explican que la «cosa juzgada» tiene por objeto evitar que se juzguen dos veces exactamente los mismos hechos. Así lo establece la jurisprudencia de la misma Corte y pactos internacionales de derechos humanos como el de San José de Costa Rica suscriptos por la Argentina. Pero este no era el caso. No se podía aplicar a un contrabando en Entre Ríos el fallo sobre un contrabando en Buenos Aires.

En 2007, a propósito de las elecciones porteñas, Menem declaraba: «Jamás estuvo pegado a mi gobierno, a pesar de que fuimos amigos, somos amigos», aclaró el ex presidente en declaraciones al diario La Capital de Rosario.

Fuera de la carrera electoral

Sin embargo, este lunes, a solo 6 días de las Paso, la Cámara Electoral sacó de la carrera electoral al ex mandatario en virtud de la condena a 7 años de prisión y 14 de inhabilitación para ejercer cargos públicos en la causa por contrabando de armas a Ecuador y Croacia, confirmada por la Cámara de Casación Penal pero sin decisión de la Corte.

De este modo, el ex presidente no podrá competir el próximo domingo en las elecciones primarias para acceder por tercera vez al cargo de senador.

Fuentes del Tribunal explicaron que los camaristas aplicaron el antecedente del caso Romero Feris, del año 2003, quien no pudo asumir su banca luego de que se declarara su «incompatibilidad ética».

Concretamente, en ese caso la Cámara Electoral concluyó que el candidato «no reunía la condición de idoneidad para postularse a senador nacional» porque «se trata de un ciudadano sobre el que pesan dos sentencias condenatorias de primera instancia por la comisión de delitos tipificados y penados en el título XI del Código Penal, Delitos contra la administración pública, y que incluyen la accesoria de inhabilitación especial perpetua -la que específica e inexorablemente se relaciona con el ejercicio de cargos públicos».

Casos similares

El Tribunal destacó ahora que los dos casos son similares, y que no hay motivos para apartarse del precedente. «Toda vez que en el sub examine no existen nuevas circunstancias ni elementos valorativos que permitan apartarse del criterio que resulta del precedente de aplicación, se impone concluir que no corresponde la oficialización de la precandidatura del nombrado», concluye la resolución.

Menem fue condenado a 7 años de prisión y fue inhabilitado para ejercer cargos públicos por 14 años por la Cámara Federal de Casación Penal, en la causa por el tráfico de armas a Croacia y Ecuador durante su gestión como Presidente.

Con este criterio, la Cámara se apartó del dictamen del fiscal electoral Jorge Di Lello, quien entiende que no hay ningún impedimento para que Menem sea precandidato en las PASO. En su dictamen, según publicó Perfil, el fiscal evaluó que las objeciones fueron presentadas con defectos formales fuera de término. Además, indicó que la candidatura del expediente se aprobó porque aún no está firme la condena que pesa en su contra por la causa de contrabando de armas a Croacia y Ecuador.

Todo ocurrió a seis días de las Paso y luego de la polémica por los fueros del ex ministro de Planificación Julio de Vido. En medio del debate parlamentario, distintos sectores de la oposición habían argumentado que el oficialismo no había impugnado la candidatura de Menem. Finalmente se presentó un particular y logró una sentencia histórica.