Por Aldo Battisacco – Enviado especial a Buenos Aires – La titular de Fesprosa en el orden nacional, Fernanda Boriotti, advirtió del alto porcentual de infectados de trabajadores de la salud por falta de elementos de bioseguridad, necesarios para atender casos de Covid 19 en el marco de la pandemia que recién comienza en Argentina.
En un documento que circuló públicamente los médicos informaron que la Secretaria de Acceso a la Salud de la Nación, Carla Vizzotti, reveló que un 14 por ciento de los 2.669 casos confirmados de coronavirus en la Argentina corresponde al personal de salud que atiende la pandemia y, de esos 374 positivos, 3 han fallecido.
Desde Fesprosa apuntaron que, al igual que la población general, los primeros casos tenían antecedentes de viaje o contactos estrechos. En los últimos días la mayoría de ellos provienen del trabajo en establecimientos de salud públicos y privados.
En diálogo con Conclusión, la titular de Fesprosa, Fernanda Boriotti, explicó que el día martes pasado se les requirió a las autoridades del ministerio de Salud de la Nación que se «comunique el resultado de los números informados por los trabajadores en los lugares donde desarrollan su actividad».
En la misma línea, indicó que desde la cartera de salud comunicaron en forma pública «las impactantes cifras, que de por sí, son alarmantes».
La referente de los profesionales de la salud, expuso que la reunión que la entidad mantuvo con el Ministerio de Salud previo a la publicación de estos datos, se planteó como prioridad la protección de los trabajadores abocados a la lucha contra el coronavirus.
Boriotti manifestó además, su preocupación por el índice de contagiados en el sector de la salid «es del orden del 14%, pasando a Italia y España», y agregó que la respuesta del ministerio «no resulto de la contundencia esperada respecto de atender las demandas formuladas», para disponer de los equipos de bioseguridad que requiere atender a las personas contagiadas de coronavirus.
«Esto no es nuevo, se viene planteando desde hace casi un mes», señaló la gremialista, al tiempo que agregó que «frente a la dificultad que existe, porque los proveedores no se presentan a las licitaciones e incluso venden con sobreprecios, como también la falta de elementos necesarios porque Argentina no los fabrica, se podría reconvertir a las empresas textiles para que fabriquen otros insumos como barbijos o camisolines para dar una respuesta a esta necesidad».
Consultada de como revertir esta realidad, Boriotti explicó que se instó al «ministerio de Producción para que tome el toro por las astas y avance en la refuncionalizacion de empresas para dar una protección adecuada a todos los trabajadores de la salud» y acotó «que la explicación fue que se estaba abriendo el comercio con China y que se debía esperar resultados de como resultaban los primeros vuelos porque se inició una nueva ruta para evitar la piratería que ya se está dando en el mundo por los elementos necesarios para atender la pandemia».
«La respuesta fue que no se podía hacer una proyección de lo que se podía conseguir», y agregó que en esta materia, «en Argentina hay personal técnico idóneo en control de calidad para encarar un proceso de producción de estos insumos indispensables en empresas que se abocarían a resolver el faltante», indicó la médica.
Ante la pegunta de cual es la provisión que se hace actualmente de elementos de seguridad, manifestó que «no son adecuados, porque los camisolines para este tipo de casos son hemorepelentes, es decir, rechaza la sangre. Si bien hay géneros de tela que no se fabrican en el país, pero si se podrían adaptar o combinar otras telas impermeables».
Para Boriotti, se deben tener decisiones y definiciones políticas «para saber que vamos a hacer, están pasando los días y no hay resultados. Esto preocupa porque esta cantidad de infectados se esta dando antes que comience el pico. Los números de otros países denotan que este porcentual que tenemos hoy en Argentina son los que se registran en pleno pico de pandemia, lo que está pasando es grave».
«Se nos dice que no es un problema de dinero, ni que afecte solo al sector público, el interrogante es porque no se toma las decisiones. Hay que agudizar las cabezas y ponerse a actuar, esto esta afectando a todos los trabajadores de la salud, médicos, enfermeras, kinesiólogos, admisionistas, bioquímicos, y también los trabajadores de la limpieza que necesitan mayor protección que el profesional que atiende. Cuando se limpia se puede mover el virus, instrumentar técnicas de limpieza y necesita cuidado, tenemos que valorizar a todos, un médico sin un equipo no existe», espresó Fernandna Boriotti.
Y remató: «Sin trabajadores no hay salud pública ni efectividad en la respuesta médica a la pandemia»..
