Aldo Battisacco – Conclusión Buenos Aires

 

Este martes se lleva a cabo la última sesión extraordinaria en la Cámara de Diputados que es, también, la última chance del Frente de Todos para aprobar el proyecto de moratoria previsional y de digitalización de historias clínicas. Ambos proyectos representan temas muy sensibles, sobre todo la moratoria, ya que le permitiría a unas 800.000 personas acceder a la jubilación. Tras una dura pelea por el quórum, que Juntos por el Cambio había supeditado a que no se avance con el juicio político a los integrantes de la Corte Suprema de Justicia, finalmente el oficialismo obtuvo el número de legisladores necesarios para comenzar el debate.

La sesión se inició con la presencia de 129 diputados, pertenecientes al Frente de Todos, el socialismo, el Frente de Izquierda, el interbloque Federal y 2 del Frente de la Concordia Misionero, ya que los legisladores de Juntos por el Cambio no dieron quórum y bajaron al recinto una vez que se logró el número necesario para iniciar el plenario.

La última sesión extraordinaria inició a las 11 para buscar convertir en ley el proyecto de moratoria previsional y el de digitalización de las historias clínicas, en lo que será la última jornada del período de sesiones extraordinarias. A pesar de que la perspectiva para la aprobación no es buena, el oficialismo aún guarda algo de optimismo.

Hay casi un millón de personas que se verían beneficiadas de aprobarse la moratoria previsional y es precisamente ese argumento lo que abrió un canal de negociación con los bloques opositores más chicos.

«Tengo esperanza de que los diputados bajen al recinto, puedan discutir esta ley y construir esta herramienta, que no es ni para Anses ni para el Gobierno, sino para 800 mil argentinas y argentinos que la están esperando», había afirmado Fernanda Raverta, titular de la Anses, por medio de un comunicado.

El proyecto de moratoria previsional establece un plan de pago de deuda previsional que permitiría a unas 800.000 personas que no cuentan con los aportes suficientes poder acceder a la jubilación. El debate de esta iniciativa había fracasado el 21 de diciembre último, cuando Juntos por el Cambio y otros bloques opositores se negaron a dar quórum para debatirlo.

Este martes intentaron repetir la estrategia y, si bien no dieron quórum, se quedaron en el edificio del Congreso. Recién una vez que la Cámara baja logró el número reglamentario para sesionar, los legisladores de este sector opositor ocuparon sus bancas.

La sesión se da en el marco de una convocatoria a la puertas del Congreso de jubilados y asociaciones gremiales y sociales que buscan visibilizar la importancia de que se apruebe la ley, y que será el correlato del «abrazo al Congreso» realizado el miércoles pasado en el mismo sentido.

Sobre la situación de miles de jubilados, el diputado del bloque Avanza Libertad por la provincia de Buenos Aires, José Luis Espert, habló con Conclusión destacó: “Hay que terminar con las moratorias porque estamos condenando a los jubilados a seguir siendo miserables. El sistema requiere una reforma muy profunda, por lo menos hay que terminar con la fragmentación. Hay cerca de doscientos regímenes jubilatorios, entre el general, las moratorias y los regímenes especiales, mientras esto siga así, vamos a seguir con el sistema previsional quebrado. Mientras sigamos con impuestos al trabajo imposibles de pagar, vamos a seguir con el trabajo en negro”.

Por su parte, la legisladora del bloque Identidad Bonaerense, Graciela Camaño, dijo a Conclusión: “Lo que estamos tratando no es una reforma previsional, eso es lo que necesitamos, pero no hay acuerdos. Estamos generando una tabla de auxilio a una enorme cantidad de personas. Se trata de resolver pequeños pasitos en un drama mucho más importante que es el tema de los empleados que durante mucho tiempo trabajan en la informalidad, y pueden acreditar una cantidad de años de servicio, pero no la totalidad de los años que les pide el sistema”.

“De alguna manera vamos a prorrogar una ley que permite seguir haciendo la operación de jubilarlos como si tuvieran la totalidad de los aportes, y generarles un programa para que se los vayan descontando y lo puedan ir pagando con la jubilación que cobran”, detalló la legisladora.

Por último, el diputado de la Unión Cívica Radical (UCR) por la provincia de Mendoza, Julio Cobos, puso reparos en la iniciativa y manifestó a este medio: “Como bloque, en Juntos por el Cambio entendemos que previo a cualquier moratoria que se paga con los mismos recursos que hay que distribuir entre los jubilados, que hoy tienen un bajo poder adquisitivo, hay que ordenar el sistema previsional. En ese orden, a mi modo de ver, ANSES sólo debería administrar los recursos de aquellos que aportan realmente al sistema previsional, y para todos los demás que contribuyen que se creen programas, llámese Asignación Universal, Pensiones, Programas de vivienda, con otros recursos, para que el Estado vaya suministrando presupuestariamente para atender esas otras necesidades”.

“La caja de jubilación debe ser para los que aportaron. Hoy en día las cosas han cambiado, la expectativa de vida es más grande que antes, la edad jubilatoria sigue siendo la misma y por lo tanto hay que atender a mayor cantidad de jubilados. Entones el aporte siempre tiene que estar, y el Fondo de Garantías debe producir el máximo de rendimiento. Hoy lo usa el Estado para financiarse con bonos o políticas de vivienda, y quizás no den la mayor rentabilidad para el sistema. Todos los beneficios sociales tienen que ir con otros recursos, para así ir compensando también el tema de la relación trabajador-jubilado que se ha perdido”, concluyó Cobos.

Los proyectos

La moratoria previsional cuenta con dictamen de las comisiones de Presupuesto y Previsión desde el pasado 3 de noviembre. La iniciativa había sido presentada en Cámara de Senadores por Anabel Fernández Sagasti (FdT-Mendoza) y tiene media sanción desde el 30 de junio pasado. La letra del mismo establece que aquellas personas que estén en edad de jubilarse, pero no tengan los aportes exigidos, podrán regularizar períodos faltantes hasta el mes de diciembre de 2008, inclusive, con una modalidad de pago en cuotas que serán descontadas de manera directa del haber jubilatorio.

En cuanto a la digitalización de las historias clínicas, perderá estado parlamentario a la medianoche de este martes de no ser aprobado en la Cámara Baja. Es motorizado por la presidenta de la comisión de Salud, Mónica Fein, y plantea la unificación digital de historias clínicas de pacientes y que la misma pueda compartirse entre distintos establecimientos médicos con un sistema de software que garantiza la carga de datos y la protección de datos personales.

La oposición teme una Asamblea Legislativa con tintes electorales

La última jornada de sesiones extraordinarias se desarrolla un día antes de la Asamblea Legislativa que -encabezada por el presidente Alberto Fernández- dejará inaugurado el 141° período de sesiones ordinarias.

Palpitando la llegada del presidente al recinto, el diputado de la Coalición Cívica por la provincia de Buenos Aires, Juan Manuel López, indicó: “Es mucho pedir para un presidente tan disociado, pero ojalá hable de la inflación, de la inseguridad, de los problemas de la gente, y reconozca algunas cuestiones internacionales que hasta ahora nos han posicionado con los países más autoritarios del mundo, es necesario que haga una referencia a la invasión de Rusia a Ucrania, que se cumple un año. Que nos hable a los argentinos de las cosas que nos preocupan, y que no empiece su campaña electoral mañana”.

Consultado por la posibilidad de que en su discurso Fernández critique al ex presidente, Mauricio Macri, el legislador opinó: “El presidente gobierna desde hace más de tres años, si tiene que seguir hablando de Macri es un problema de él. Me parece que va a empezar su campaña electoral mañana, y eso es lo más triste, que utilice este recinto para eso”.

Por su parte, y en referencia a la Asamblea Legislativa, Camaño adelantó: “Yo no tengo grandes expectativas respecto a los discursos de Alberto Fernández porque en estos años no han sido relevantes, el contenido que se les dio respecto a proyectos después no se cumplió en la realidad. Para mí es una ceremonia formal”.