El ingeniero Luis Lombó renunció a su cargo de subsecretario de Coordinación de Asuntos Hídricos del gobierno provincial, en solidaridad con el ex titular de la misma área, Roberto Porta, despedido por el gobernador Miguel Lifschitz después de las inundaciones.

Para comunicar su decisión, Lombó le envió una carta al ministro de Infraestructura y Transporte, José León Garibay, que en términos destemplados calificó de “desastrosa” la gestión de los gobiernos socialistas en materia hídrica y defendió a Porta considerando que fue utilizado como “chivo expiatorio”.

“Lamentablemente nada hizo usted (le dijo a Garibay) y hoy se pueden ver los resultados de su generosa política de acuerdos con la provincia de Córdoba en desmedro de los ciudadanos de nuestra provincia”, señaló.

Además, le recordó al ministro todas las solicitudes y advertencias que le hiciera durante su desempeño en el cargo y recurrió a citar una frase de Joan Manuel Serrat para calificar la situación: “Nunca es triste la verdad lo que no tiene (con los socialistas a cargo) es remedio”.

Por otra parte, en una entrevista concedida a Radio 2 Lombó afirmó: «Me siento muy molesto por lo que han hecho con el ingeniero (Roberto) Porta, a quien han despedido por medios públicos y ni siquiera han sido capaces de llamarlo antes para avisarle de esta situación. Fue realmente un destrato».