«Yo sé que desde el cielo vas a estar velando por los cordobeses y por que haya unión entre los Argentinos», afirmó el gobernador cordobés, Juan Schiaretti, al ofrecer un último adiós a su antecesor en el cargo, José Manuel de la Sota, en medio de una profunda emoción durante la ceremonia final del funeral de Estado al ex mandatario provincial.

En medio de una profunda emoción, Schiaretti señaló que con la muerte de De la Sota «queda una pérdida enorme» y sostuvo que el ex gobernador «amaba como nadie a Córdoba».

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«Llevo grabadas las imágenes de quienes pasaron por aquí a despedirse. ¡Todo lo que te quiere el pueblo de Córdoba!», subrayó el mandatario en la la ceremonia final del funeral de Estado que se realizó al ex gobernador en el Centro Cívico provincial.

Además, Schiaretti subrayó: «Esta enorme cantidad de gente y funcionarios que se están pronunciando por él, es consonancia al tamaño que tiene José Manuel».

También se refirió al fallecido dirigente peronista el ex gobernador entreriano, Jorge Busti: «El Gallego fue un amigo, los dos fuimos tres veces gobernadores de nuestras provincias. Y entre nosotros soñamos la Región Centro».

Las puertas del velatorio se reabrieron esta mañana cerca de las 10:00 para el público en general.

Luego, se realizó una Capilla Ardiente para despedir al ex gobernador, junto a sus allegados, amigos y autoridades.

En ese contexto, habló quien fuera su última pareja: Adriana Nazario, quien, conmovida, señaló: «Se fue mi maestro, mi amor, mi todo».

Hasta el Centro Cívico llegaron el juez de la Corte Suprema Juan Carlos Maqueda; la ex esposa de De la Sota, Olga Riutort; así como el presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.

Los restos del exgobernador serán trasladados hacia el panteón familiar del cementerio San Jerónimo, ubicado en el barrio Alto Alberdi, donde descansarán en su morada final.

«Fue sin dudas la mayor figura que tuvo el peronismo de Córdoba en nuestra historia. Fue uno de los mayores dirigentes que tuvo el peronismo en el orden nacional. Algo que dejó como impronta era saber que del dolor, de la injusticia, de la persecución solo se sale con unidad y sin rencor», recalcó en su discurso Schiaretti.

Además, el gobernador subrayó: «Con esta muerte trágica que nos conmovió a todo el país pierde un gran dirigente democrático y nuestro movimiento pierde a uno de los mejores candidatos a Presidente que podría haber tenido».

En presencia del arzobispo cordobés, monseñor Carlos Ñáñez, también tomó la palabra el intendente de la capital provincial, Ramón Mestre, quien definió a De la Sota como «un político diferente, distinto».

«Nos ha legado, nos ha enseñado tres situaciones que son muy importantes para los que militamos y también para todos los habitantes de la provincia y del país. Ante las adversidades de la vida se levantó y siguió adelante. eso es una demostración que todos debemos tener en cuenta», dijo.

Según señaló, el dirigente peronista «se agiornó siempre a los tiempos» porque «la vida y el mundo cambia, es dinámico».

«Siempre acompañó los cambios y siempre estuvo a la vanguardia, un paso adelante. Y el tercer elemento es el diálogo de manera permanente con todos los miembros de la sociedad, con respeto y tolerancia. Lo reconocemos con profundo dolor», dijo Mestre quien consideró «un amigo» a De la Sota.