El oficialismo aprobó esta madrugada en la Cámara de Diputados la ley que crea la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en reemplazo de la actual Secretaría de Inteligencia. Luego de una extensa sesión, la votación fue la siguiente: 131 votos a favor y 71 en contra.

El debate del proyecto enviado por el Poder Ejecutivo y aprobado por el Senado comenzó 21.30 del miércoles y concluyó pasadas las 4 de este jueves con una votación en la que la oposición rechazó unánimemente la nueva norma y el oficialismo la sancionó en soledad.

Si bien se opuso al proyecto por considerar que no imprime un verdadero cambio en el funcionamiento de los organismos de inteligencia, la oposición cambió la estrategia empleada en el Senado, donde optó por no participar de la sesión, y decidió quedarse a debatir el proyecto.

Las principales críticas de la oposición apuntaron, además, al rol del jefe del Ejército, César Milani, a quien ubican como el nuevo jefe de la inteligencia nacional.

La diputada oficialista Diana Conti abrió el debate recordando que la presidenta Cristina Kirchner «cambió las autoridades» de la Secretaría de Inteligencia «y algunos agentes cuya autoridad es más mítica que real», en alusión a Antonio «Jaime» Stiuso.

Afirmó que «la exSIDE va a quedar totalmente disuelta» y destacó que se le «saque la tarea de las escuchas, poniéndola en el extrapoder que es la Procuración General», al tiempo que le pidió a la oposición que «ayude a terminar con el contubernio» entre «los servicios de inteligencia y el Poder Judicial».

En tanto, la diputada oficialista Teresa García, presidenta de la Comisión Bicameral de Control de los Organismos de Inteligencia, aportó como dato novedoso que transcurrido el plazo de los 120 días para la creación del nuevo organismo se habilitará un plan de retiro jubilatorio para los empleados de la Secretaría de Inteligencia que cumplan con los requisitos.

Por su parte, la diputada de la Coalición Cívica Elisa Carrió preguntó «por qué no se elimina la Side«, a la que calificó como una «banda de criminales» y criticó al Gobierno porque, según dijo, «ahora suman a la Side de (el agente Fernando) Pocino y a la inteligencia de (el jefe del Ejército, César) Milani».

«Comparto enfrentar entre todos a los servicios, lo que no comparto es este camaleón, lo que no comparto es que nos quieran vender transparencia», argumentó Carrió al criticar el proyecto y, además, aprovechó para criticar tanto a exagentes como a referentes de la oposición.

Al igual que Carrió, el diputado del Frente de Izquierda Néstor Pitrola también le apuntó al jefe del Ejército y sostuvo que «mientras el oficialismo pregona una falsa democratización de los servicios, están haciendo pasar con esta nueva ley lo más grave: la injerencia de Milani en las operaciones criminales complejas».

En tanto, el radical Manuel Garrido calificó el proyecto como «una cortina de humo que no va a resolver nada», mientras que su compañero de bloque José Cano sostuvo que «este Gobierno tiene una enorme responsabilidad en lo que está denunciando».

La diputada del GEN Margarita Stolbizer rechazó que la reforma busque la «democratización» de los organismos de inteligencia y sostuvo que «la democratización la usaron cada vez que quisieron apropiarse de algo y terminaron en zafarranchos».