El Gobierno Nacional autorizó a que la construcción de obras privadas en Rosario y Santa Fe quede exceptuada del aislamiento social, preventivo y obligatorio, tal como lo habían solicitado autoridades provinciales.
Este jueves, un decreto publicado en el Boletín Oficial dio a conocer que en ambas ciudades se habilitaba el servicio de mudanzas y la actividad inmobiliaria. Sin embargo, un error en la redacción del documento olvidó colocar a las obras privadas dentro de las actividades permitidas.
Minutos más tarde, Jefatura de Gabinete anunció la inclusión de las obras menores en las actividades permitidas para los dos conglomerados urbanos.
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De esta forma, las obras privadas podrán retomar su actividad la próxima semana, con un máximo de cinco obreros trabajando al mismo tiempo, quienes además deberán recibir un Certificado único Habilitante para poder circular y trasladarse hasta sus puestos de trabajo.
A su vez, la disposición aclara que las obras menores podrán ser retomadas siempre que los trabajos “no impliquen ingresar a viviendas con residentes, locales o establecimientos en funcionamiento».
Por otro lado, cada Municipio deberá establecer los protocolos sanitarios que dicha actividad deberá cumplir.
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En tanto, se deberá garantizar la “organización de turnos, si correspondiere, y los modos de trabajo y de traslado que garanticen las medidas de distanciamiento e higiene necesarias para disminuir el riesgo de contagio del nuevo coronavirus”.
El decreto establece también que “las empleadoras y los empleadores deberán garantizar las condiciones de higiene y seguridad establecidas por las respectivas jurisdicciones para preservar la salud de las trabajadoras y de los trabajadores”.
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