El Pami, comenzó a aplicar un proceso de recorte dentro del personal jerárquico del organismo. Se trata de 170 empleados que habían sido nombrados por la gestión anterior, encabezada por el ex titular del establecimiento, Carlos Regazzoni.

Entre los puestos que fueran desplazados de sus funciones se encuentran directivos, secretarios, y gerentes. Según informó Clarín, los empleados despedidos cobraban un promedio salarial de 70.000 pesos mensuales, por lo tanto, por medio de esta medida de ajuste, lo que se busca es ahorrar una suma anual millonaria.

De las nueve secretarias que funcionaban en la gestión del ex titular, se reducirían solo a cuatro, de las cuales  solo tres quedarían con un secretario a cargo, y la restante con un Subdirector ejecutivo.

Según informó Clarín, una fuente cercana a la conducción del organismo indica que quienes fueron desplazados de sus puestos eran cargos políticos, y no de trabajadores de carrera. Sólo quedaran 80 jerárquicos en el establecimiento.