Por Aldo Battisacco – Desde Buenos Aires (Enviado Especial)

El líder del Frente Renovador, diputado nacional Sergio Massa, vuelve a la carga, a pesar del oficialismo, con un proyecto para gravar la renta financiera en favor de sectores más desprotegidos, tales como jubilados, desocupados y trabajador con empleo no formal. Se busca con la iniciativa que los aguinaldos no paguen ganancias y serían presentada antes del tratamiento del presupuesto 2017.

Las medidas son impulsadas por el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, quien se propone que se compensen jubilaciones y planes sociales ante la pérdida de la capacidad de compra y que los aguinaldos no paguen Ganancias.

La iniciativa carece de respaldo por parte del oficialismo, pero Massa volvió a la carga con el proyecto que ya había propuesto, como precandidato presidencial en febrero de 2015 que propuso sustituir la recaudación del impuesto a las Ganancias, sustituyéndolo por otro tributo como la renta financiera, y el IVA a los laboratorios extranjeros.

Poco después, en marzo, se desdijo públicamente diciendo que se trataba de gravar la renta al juego y no el IVA, ya que en ese entonces no estaban exentos.

Actualmente, la iniciativa tiene en vilo al Ejecutivo, por los costos que le insumiría visto que el déficit fiscal no se redujo como lo esperaba Macri, y además porque necesita imperiosamente una cuota de oxígeno que busca conseguir mediante inversiones.

La polémica gira en relación al primer proyecto, que busca fondos frescos de las inversiones de dinero, que no están gravadas con el impuesto a las ganancias.

“Las jubilaciones y los planes sociales pierden poder adquisitivo frente a la inflación, en forma cíclica. Eso es lo que buscamos solucionar”, dijo Sergio Massa

La vuelta de tuerca, la dio al señalar que “El Presupuesto se presenta ahora y se votaría recién el 26 de octubre; queremos tratar dos temas importantes para la gente antes”.

La intención del ex intendente de Tigre, es favorecer a 7 millones de jubilados que cobran un haber y medio, e incorporar a un millón de beneficiarios de planes sociales y a 4 millones de trabajadores informales.

Porque, según el ex candidato  a presidente “Sus haberes se ajustan dos veces al año con la fórmula movilidad que dictan la recaudación y la evolución de los salarios, y así pierden contra la suba de precios”, precisó.

De esta manera, la masa de recursos obtenida generaría un fondo para compensar las asimetrías que padecen los sectores de menores ingresos. Y lo financiaría con los 22.000 millones de pesos que, estima, pagarían por Ganancias la renta financiera, hoy exceptuada. A esto se le agrega un impuesto al juego.

En tanto que el segundo proyecto, propende que “el segundo aguinaldo quede exceptuado del impuesto, para que la gente tenga mayor poder adquisitivo a fin de año”.

Los votos están, y se convierte peligrosamente en una piedra en el camino a Cambiemos, puesto que podría condicionar la discusión del `presupuesto si el oficialismo no se aviene a considerarlo en una negociación.