Enviado especial a Buenos Aires – Una iniciativa que procura dar cumplimiento efectivo de la Ley de Educación Sexual Integral a lo largo de todo el territorio nacional, generó desencuentros entre los asistentes, debido a la falta de debate que se le dio al tema. El caso es que este martes, el proyecto logró dictamen de parte de quienes ya habían votado a favor de la interrupción voluntaria del embarazo, mientras que en el grupo “celeste”  criticó algunos puntos de la redacción.

La acalorada discusión marcó el plenario de las comisiones de Educación y de Familia, Mujer, Niñez y Adolescencia de la Cámara de Diputados, donde participó una nutrida concurrencia de ciudadanos en contra del aborto, que por un momento logró interrumpir los discursos a los gritos: “¡Los primeros educadores son los padres!”, “¡A mis hijos los educo yo!”, “¡Degenerados!”.

En disidencia con lo que acontecía, Marcela Campagnoli (Coalición Cívica), Gabriela Burgos (UCR) y Flavia Morales (Frente de la Concordia Misionero) opusieron reparos a la firma del dictamen, argumentando que faltó debate previo y reclamaron más tiempo para firmar el proyecto. En tanto que el diputado José Riccardo, titular de la Comisión de Educación, fundamentó que “la gran mayoría” estaba dispuesta a despachar el proyecto.

 

Por su parte, la legisladora de Cambiemos, Silvia Lospennato (Pro) aclaró que, “como en tantas otras leyes”, la letra de la ley podrá ser modificado en el recinto y les recordó a los diputados que votaron en contra del aborto legal que  se habían comprometido a trabajar por la educación sexual. “Queremos saber si van a cumplir con su palabra”, los conminó.

El dictamen firmado en el plenario,  declaró a la Ley de Educación Sexual Integral “de orden público”, con el objeto de que esos contenidos curriculares sean de aplicación obligatoria en todas las instituciones educativas de la Argentina, sean de gestión estatal o privada.

En esta línea, se buscó la eliminación del artículo 5 de la ley vigente y que posibilita que los establecimientos educativos adapten la educación sexual a “su ideario institucional y a las convicciones de sus miembros”. Esto trajo aparejado el rechazó a esa modificación puesto que cuestionó que se reemplace el concepto de “comunidad educativa” de la norma original por la palabra “institución”.

El santafecino, Albor Cantard (UCR), quien fue exsecretario de Políticas Universitarias defendió la modificación y aclaró que en le artículo 6 se convoca a “vincular más estrechamente la escuela y las familias para el logro de los objetivos”.