El jefe de Gabinete, Marcos Peña, aseguró que la reforma laboral que impulsa el Gobierno va a ser «beneficiosa para la creación de trabajo formal y de calidad» y defendió la política económica al sostener que «hay una caída del déficit».

El referente del Ejecutivo respaldó el trabajo que hacen en Casa Rosada y explicó que «el crecimiento se sostiene a partir de la inversión» que, de acuerdo con su visión, «está en un nivel muy alto en relación con los años anteriores».

De esta manera, rechazó que el Estado esté financiando su desarrollo a través del déficit y opinó que «es una muy buena noticia para el país que estemos endeudándonos a la tasa más baja de la historia».

«Nosotros no estamos trabajando para la inversión extranjera, para el Fondo Monetario, para todas esas etiquetas ideológicas que no explican la realidad. Trabajamos para salir de la pobreza y generar trabajo y para eso hay que ser pragmáticos. Toda realidad obliga a estar en una mesa sindicatos, gobiernos y empresarios», señaló. .

En esta línea, el jefe de los ministros reconoció que «los indicadores de la economía» hasta «hace poquito estaban en algunos casos iguales o peores» a los de la gestión kirchnerista, pero aseguró que eso indica «el costo de la normalización de una economía que no era sustentable».

«En el 2015 no había Presupuesto, y hubo una rectificación del 20% del déficit. En un país donde no había datos de nada y teníamos una cantidad enorme de pasivos no computados, entre ellos el default o la deuda con los jubilados, que estamos pagando nosotros con la Reparación. Todo eso nos lleva a entender que el déficit era superior al de hoy», precisó.

Durante una extensa entrevista con el diario Tiempo Argentino, Peña insistió con que no son «un gobierno ideológico que viene con un libreto a forzar la realidad a lo que piensa», sino que buscan «solucionar los problemas» que tiene la Argentina.

Entre otras cosas, el jefe de Gabinete defendió los proyectos de reforma que aprobó el oficilalismo en el Congreso y las modificaciones en el ámbito laboral que se van a debatir próximamente y que, ratificó, no serán como las que implementó Brasil.

«La tranquilidad de que no hay una reforma a la brasileña es que hemos consensuado una reforma con la CGT que es beneficiosa para la creación de trabajo formal y de calidad. Pero si alguien no tiene tranquilidad con eso, estamos en un país con minoría parlamentaria, de modo es que eso obliga a que se debatan todos los temas», consideró al respecto.

Por otra parte, Peña aceptó que «puede ser que haya una parte de la gente que no haya entendido» la reforma previsional, pero confió en que «cuando (los jubilados) cobren más esos miedos se va a disipar».