Para Patricia Bullrich, presidenta del PRO, las denuncias sobre supuestas tareas de espionaje ilegal de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) en la gestión pasada y las presuntas irregularidades en el otorgamiento de préstamos al Grupo Vicentin son una campaña de kirchnerismo para perjudicar al ex mandatario Mauricio Macri.

Según la ex Ministra de Seguridad, las denuncias que involucran a Macri son «un intento de igualación» por parte del kirchnerismo y afirmó que el oficialismo busca «meter en el barro a un Gobierno que ha sido absolutamente institucionalista».

«Frente a toda la teoría que empezó hace casi ocho meses, del lawfare, de querer limpiar toda la escena de la corrupción del kirchnerismo anulando las causas, la estrategia es `golpeo para intentar que mis causas tengan el mismo valor que las que estoy presentando´», sostuvo Bullrich.

En declaraciones radiales, la ex diputada nacional insistió en que esos expedientes judiciales «tienen como objetivo generar una especie de empate» por parte del kirchnerismo y afirmó que forman «parte de un plan de impunidad».

“Intentan generar otro debate. Intentan decir que hubo bajo nivel de institucionalidad» en el Gobierno de Cambiemos, se quejó la referente opositora.

Al ser consultada sobre si detrás de las causas judiciales estaba la vicepresidenta, Cristina Kirchner, Patricia Bullrich aseguró que «sin dudas» y reiteró que se trata de un «plan de impunidad» del kirchnerismo.

Acerca de la denuncia de la Unidad de Información Financiera (UIF) sobre presunto lavado de dinero de parte de Macri, la presidenta del Consejo Nacional del PRO manifestó: «Eso de acusar de lavado de dinero sin fundamento alguno, sin ningún tipo de investigación previa es algo tirado de los pelos, en el mismo día en que se intenta expropiar la empresa».

«La inhibición de los bienes que pidió la UIF tiene el objetivo de emparejamiento, de igualación, de barro. No lo vamos a aceptar. No sé si lo quieren meter preso o no (a Macri), pero va en contra de la teoría que ellos mismos han planteado de que las personas no tienen que ir presas», concluyó.