En la provincia de Catamarca, los agentes de policía y del Servicio Penitenciario tienen prohibido utilizar el teléfono celular en horarios laborales, salvo en algún caso extremo en el que se requiera llamar a un superior.
Tal disposición, que rige dese ayer, fue emitida por el nuevo secretario de Seguridad de la provincia, Marcos Denett, y ya generó polémica entre los uniformados, según informaron la agencia de noticias Télam y el diario local Esquiú.
Se aclara en la medida, además, que el incumplimiento de dicha prohibición será tomado como una falta de carácter grave al régimen de servicio.
En los fundamentos de la decisión se hace hincapié en la necesidad de contar con personal «atento, predispuesto, proactivo y presto a anticiparse a la comisión de una contravención, delito o motín».
“En contrapartida, el uso indiscriminado del teléfono celular «provoca falta de atención y es visto como signo de desinterés y falta de compromiso con la tarea de vigilancia», según sostuvo un funcionario provincial.
Son varias las provincias del país donde está prohibida la telefonía móvil, como Salta y Córdoba, por citar ejemplos cercanos en el tiempo. La visión desde la Secretaría de Seguridad catamarqueña es que se considere el teléfono celular «una herramienta de trabajo para la transmisión de situaciones trascendentes hacia los superiores y no para diversión o tratamiento de ligerezas».
En provincias como Córdoba, por ejemplo, el propio jefe de policía manifestó que la medida ayudaría a mejorar la imagen que la sociedad tiene de los agentes.
Justamente en la resolución de Catamarca, se expresa: «La atención dispensada por los agentes a sus celulares genera sentimientos de rechazo, enojo y hasta fastidio por parte del ciudadano y de los internos que reclaman protección y cuidado».
Para comunicarse entre sí, aclararon, los policías cuentan con equipos de radio HT. A mediados de marzo de este año, se hizo entrega de 160 de estos equipos, entre otros elementos que precisaba la fuerza de seguridad. También es importante aclarar que algunos agentes cuentan con celulares provistos para agilizar algunas tareas o para transmitir información que no deba ser escuchada por toda la red.
