La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner apeló este lunes la resolución de la Cámara de Casación que reabrió la instancia de juicio oral en las causas Los Sauces y Hotesur por presunto lavado en los hoteles propiedad de la familia.

En ese mismo expediente, este lunes quedó firme el sobreseimiento definitivo de Florencia Kirchner, la única de todos los imputados a los que el máximo tribunal penal desvinculó de la supuesta maniobra de lavado y dádivas.

Los abogados de Cristina KirchnerCarlos Alberto Beraldi y Ari Llernovoy, también apelaron el fallo que reabrió la causa por el Memorandum de Entendimiento con Irán para avanzar en el esclarecimiento del atentado contra la AMIA.

Según las presentaciones la defensa de la expresidenta planteó, entre otros argumentos, que esas resoluciones fueron dictadas sin la intervención de la jueza Ana María Figueroa, que había cesado en sus funciones por disposición de la Corte Suprema por haber alcanzado el límite de 75 años.

La ausencia de la magistrada en esos fallos, que se definen por el voto de tres jueces, fue considerado como de «dudosa constitucionalidad» por la exmandataria.

Si bien la ley “hablita a la Cámara Federal de Casación Penal a dictar sus pronunciamientos con el voto concurrente de dos de sus jueces”, resulta de “dudosa constitucionalidad”, expresó la defensa de la Vicepresidenta.

Y cuestionó que los magistrados «no tienen una prerrogativa discrecional para acotar el marco de deliberación y excluir del debate a un tercer juez que, según la ley y los reglamentos dictados en consecuencia, también debe discutir con sus colegas e intercambiar opiniones para luego dictar sentencia”.

“La Sala que dictó el fallo quedó indebidamente constituida sólo por dos jueces, habiendo sido excluida de la resolución del caso la tercera magistrada a través de una decisión de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que no registra antecedentes similares y que resulta contraria a la práctica seguida con relación a otros magistrados que se encontraban en idéntica situación a la de la jueza Figueroa”, sostuvieron en las apelaciones los abogados Alberto Beraldi y Ary Llernovoy, que representan a la vicepresidenta.

Se trata de la magistrada a la que la Corte Suprema cesanteó el 6 de setiembre último pero a quien el Senado le otorgó un nuevo acuerdo para su continuidad después de cumplir 75 años la semana pasada.

La defensa de la vicepresidenta criticó la decisión de la Corte cuando aún estaba pendiente de tratamiento el nuevo acuerdo para la continuidad de Figueroa: “resulta contraria a la práctica seguida con relación a otros magistrados que se encontraban en idéntica situación”.

Respecto de Florencia Kirchner, el fiscal general Mario Villar consintió el sobreseimiento dispuesto por un tribunal oral y ratificado por la Casación, con las firmas de los jueces Daniel Petrone y Diego Barroetaveña.

La única manera para que la hija menor de la vicepresidenta volviera a estar vinculada con la investigación es que o la propia Casación o la Corte Suprema dictara la nulidad del fallo sobre Los Sauces y Hotesur y ordenara una nueva resolución.

Aun así, las defensas podrían plantear la situación de “cosa juzgada” y batallar para que se confirme su sobreseimiento, habida cuenta de que nadie lo objetó.

El fiscal Villar consideró que el sobreseimiento es “razonable”, aunque deslizó que hubiera preferido que eso surgiera como consecuencia del juicio oral por realizarse.