El juez federal Claudio Bonadio reemplazará desde el lunes próximo y durante una semana a su par Sergio Torres en la causa que investiga si los hermanos Martín y Christian Lanatta y Victor Schillaci contaron con apoyo del narcotráfico para mantenerse prófugos durante 15 días.

Torres pidió una semana de licencia y la Cámara Federal porteña designó a Bonadio en su lugar, informaron fuentes judiciales.

Entre fines de esta semana y principios de la próxima, el fiscal federal Jorge Di Lello dictaminará si corresponde o no unificar esta causa con otras dos abiertas en distintas jurisidicciones a raíz de la fuga del penal de General Alvear y de un tiroteo en la localidad bonaerense de Ranchos.

Una vez que cuente con ese dictamen del fiscal, el juzgado resolverá si hace lugar al planteo de la defensa de Lanatta, que pidió unificar todo en el ámbito porteño, lo rechaza y siguen las pesquisas como están o toma algún otro tipo de resolución en el caso.

Esta causa abierta a raíz de una denuncia del gobierno nacional investiga si los condenados por el triple crimen de General Rodríguez contaron con logística o dinero proveniente del narcotráfico para mantenerse prófugos desde la fuga del penal de General Alvear, aunque por el momento no hay imputaciones concretas contra nadie.

En la última semana Torres tomó declaraciones testimoniales y espera el resultado del peritaje de dos teléfonos celulares dejados por los entonces prófugos en una camioneta durante la huida.

En el juzgado no cuentan aún con las actas de detención de Christian Lanatta y Schillaci en la localidad santafesina de Cayastá, el lunes último, para determinar qué elementos tenían en su poder al ser apresados y si hay algo que pueda sumar a la investigación.

Dichas actas permanecían aún en la justicia santafesina, informaron fuentes judiciales que, por el contrario, aseguraron que sí se recibieron las actas de detención de Martín Lanatta, ocurrida el sábado anterior en la misma localidad santafesina, donde consta que llevaba un bolso con 155 municiones de armas de distintos calibres y dinero en efectivo, entre otros elementos.

El magistrado porteño tenía previsto trabajar todo enero pero solicitó la licencia y volverá a su juzgado el 25 de este mes.