Por Aldo Battisacco . Enviado especial a Buenos Aires – Hay pensamientos e imágenes que se ensañan con el ninguneo que le dan los funcionarios de la Alianza Cambiemos a la petición de que se declare emergencia alimentaria. El tema no es nuevo, lleva dos años y medio y en aquel entonces ya se advertía el peligro que corrían los sectores populares si se le daba continuidad al plan económico del gobierno.

Tras pasar todas las instancias parlamentarias el proyecto de Emergencia Social, se aprobó en el Congreso en ámbas Cámaras por unanimidad, pero a la hora de tener que dar el cumplimiento a la norma, los sectores que necesitan que ese ordenamiento se materialice, quedan esperando las soluciones para las que fue votada, 

Tras la reunión que se realizó en el Salón Delia Parodi del Congreso Nacional, los referentes de los movimientos sociales fueron contundentes respecto de la forma en que se debe resolver la urgencias de los sectores más vulnerables de la población. 

Esteban «Gringo Castro de a Ctep, destacó a Conclusión que «hace tiempo que junto a distintos sectores de la sociedad civil, se está planteando la emergencia alimentaria, la Iglesia, los docentes -que plantean la situación de los comedores escolares-, y referentes de la pequeña empresa, como tantos otros para encontrar una respuesta».

«Estamos dispuestos para garantizar la paz social, reclamar pacíficamente que los diputados se reúnan y debatan sobre los 7 proyectos, para que la semana que viene se declare al emergencia alimentaria. Tenemos la voluntad de movilizar para fortalecer esa decisión. Si quisiera, el jefe de Gabinete, puede asignar partidas para duplicar la cantidad de alimentos que merecen los pibes», apuntó 

En relación a la sospecha oficial, de que la dirigencia social miente acerca de las condiciones de emergencia de grupos de la población afectados por el hambre, Castro, expresó «antes de hablar, sería bueno que haga lo que no hicieron, ir a los barrios a visitar comedores». 

Por su lado, la dirigente del Frente Popular Darío Santillan, Dina Sánchez, increpó al presidente Macri, al decirle «que pareciera que no ve el hambre, y que en un país rico como Argentina, uno de cada tres pibes sea pobre. Es muy fácil hablar desde un escritorio cómodamente, como lo hace el ministro Lacunza, diciendo que no se declare la emergencia alimentaria».

«Invito al presidente y al ministro a que vaya a los barrios y vea la pobreza que se vive, es fácil opinar cuando no se pasa hambre», disparó Sánchez.

Por su lado, Juan Grabois señaló que «quedamos conformes con un compromiso concreto de unificar los proyecto en uno solo, y que se reúnan para sesionar y aprobar la emergencia alimentaria». Sin embargo el presidente de la Nación tiene la facultad de resolver esto hoy, para que no hayas pibes, ancianos y familias que les falte el alimento, sobre todo en comedores escolares que no tienen cupos nui raciones suficientes para quienes necesiten comer». 

Consultado si cree que el gobierno ha tomado nota de los reclamos, el referente de la Ctep, respondió que si «el ejecutivo no resuelve, resolverá el poder legislativo, y es bueno que la participación de la Pastoral Evangélica, el equipo de sacerdotes de villas de emergencia, fundaciones, ONG y organizaciones sociales y  docentes, porque es evidente que hay millones de argentinos la pasan mal». 

Finalmente, Grabois adelantó que la semana próxima, cuando se convoque a sesión especial, «se acompañara desde todos los sectores que reclamamos la emergencia alimentaria y piden que se haga una realidad efectiva si el presidente no despierta y descubre que lo puede resolver hoy».