Por Alejandra Ojeda Garnero

En la jornada del feriado patrio se produjeron cinco muertes violentas que incluyeron la de una nena de 12 años que fue hallada en una vivienda precaria con signos de abuso y ahorcamiento, en otros hechos confusos un hombre fue hallado en una zanja con dos heridas de bala, un joven murió tras recibir un disparo en la cabeza en Villa Gobernador Gálvez y una mujer fue hallada sin vida en la vía pública, también con dos balazos en distintas partes del cuerpo, mientras que finalmente un barrabrava de Rosario Central fue acribillado a balazos en las últimas horas de la tarde.

Ante esta situación, que deja indefensa a la sociedad frente a una evidente ola de homicidios y hechos de robo que a la vez se producen con extrema violencia y que en ocasiones terminan con la vida de la víctima, urge la respuesta desde quienes ostentan el poder para tomar decisiones que pongan un freno inmediato a estos hechos que ponen en serio riesgo a la población. Entre los delitos más frecuentes se encuentran los homicidios, que en menor medida se producen por problemas interpersonales o intrafamiliares y los delitos contra la propiedad, arrebatos, asaltos en la vía pública y entraderas.

En lo que va de este 2016, un total de 85 personas perdieron la vida de forma violenta en la ciudad y alrededores, de ese total 73 casos ocurrieron por heridas de arma de fuego, lo cual también deja al descubierto un mercado ilegal de armas que facilita el acceso a las personas que se dedican a delinquir.

La respuesta para la solución de esta problemática parece no llegar, al menos de forma inmediata. Desde el ministerio de Seguridad aseguran que se siguen implementando políticas para frenar la violencia en la ciudad, como la mayor presencia policial en las calles lo cual implica una mayor prevención con lo que esperan bajar los índices de delitos. Los cuales configuran un escenario prometedor pero no suficiente para la expectativa de la sociedad.

Lo cierto es que desde el inicio de la gestión de Maximiliano Pullaro se hacen anuncios grandilocuentes sobre la política de seguridad para bajar los índices de delito, pero en las calles no se ve reflejado ya que cada día se incrementan los robos y las muertes violentas.

Con los hechos del feriado, que incluyó el asesinato de cinco personas, el ministro debió salir a dar explicaciones al respecto, pero sólo con promesas a futuro y la sociedad necesita respuestas urgentes.

Sin embargo, dijo que “vamos a seguir trabajando para tener mayor policía en la calle como lo hicimos hasta el día de hoy, si aumentamos la prevención probablemente bajemos los índices de delito. Tenemos que trabajar de manera mancomunada con otros ministerios para tener una mirada más profunda de lo que es la violencia”.

Consultado por Conclusión sobre los planes que están implementando para combatir el delito, Pullaro indicó que “tenemos más policías en la calle, una actitud diferente de la policía, estamos llevando adelante el sistema de cuadrantes donde va a haber recursos asignados a través del sistema 911 pero con una base tecnológica que no haga que el poder lo tenga una comisaría, como sucede hasta ahora”.

Pullaro en gobernación Salvador

Con respecto a los factores que inciden en estos hechos violentos, el ministro indicó que “hay una violencia cultural inusitada y que nos llama poderosamente la atención y que tenemos que trabajar desde diferentes lugares, no sólo de la seguridad pública, sino tendríamos que poner un policía en cada casa o en cada fiesta”. A la vez apuntó que “los casos de mayor violencia ocurren en lugares donde existe un alto grado de exclusión social”.

Ante la violencia desatada durante el feriado Pullaro refirió que “estamos preocupados y esperamos que puedan ser esclarecidos”, pero insiste en que “seguimos trabajando en el aumento de la prevención del delito, en mayor cantidad de detenciones, en el secuestro de armas ilegales y mayor patrullaje en las distintas zonas de la ciudad”.

Pero hasta el momento son sólo promesas ya que Pullaro indicó que “vamos hacia una mejor policía, a una manera diferente de patrullaje, donde haya barrios con recursos policiales asignados y que podamos ver a través de la tecnología para ver si cumple sus funciones”.

De todos modos aseguró que “nos hacemos cargo de nuestra parte, la seguridad pública es nuestra responsabilidad y estamos trabajando en eso”, pero insiste en que “la mayor cantidad de hechos violentos se producen en ámbitos intrafamiliares y por problemas interpersonales lo cual dificulta que la implementación de políticas públicas pueda terminar con la violencia”.

Con este panorama, la respuesta que brindan desde el ministerio de Seguridad sobre las acciones concretas para terminar con el delito no son alentadoras para una sociedad que pide a gritos una solución y cada día se ve inmersa en un mayor escenario de violencia.

Feín- Obras - Vecinos Salvador

Por otra parte la intendenta Mónica Fein se refirió a los hechos del feriado patrio. Respecto de los hechos delictivos y muertes de los últimos días la intendenta manifestó: “Nos sumamos a un plan de reforzar todas las aéreas de seguridad de la ciudad. Veo un gran compromiso pero lamentablemente la situación nos demuestra que hay mucho por hacer y trabajar porque sigue habiendo un tema de inseguridad muy alto en Rosario, por lo cual habrá que reforzar los esfuerzos y trabajar más arduamente en ese tema”.

 

Además adelantó que habrá cambios en la estructura del patrullaje “que está planificando para los próximos días desde ministerio de Seguridad”. “Habrá una modificación en la estructura policial, en comisarías, hay una incorporación de tecnología muy importante. Todo eso está muy bien encaminado resolución muy alta en muchos de los temas de delito que se están dando en la ciudad, nosotros destacamos ese compromiso pero obviamente con los hechos de violencia de los últimos días no podemos dejar de decir que falta mucho por hacer”, cerró la intendenta.

 

Foto principal: ilustrativa