Obispos de todo el país se reunirán a partir del próximo lunes en la casa de ejercicios El Cenáculo-La Montonera en Pilar en el marco de su Asamblea Plenaria de fin de año, que se dará en medio de cierta tensión interna por los recientes roces con la Casa Rosada.

Se trata de la Asamblea Plenaria número 116 de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), que se desarrollará hasta el sábado 10 posiblemente con la difusión de un documento consensuado.

Del encuentro participará el obispo de Mercedes-Luján, Agustín Radrizzani, quien quedó en el ojo de la tormenta y debió pedir «perdón» por la misa que ofició hace dos semanas frente a la tradicional Basílica con la participación de varios sindicatos críticos del Gobierno, liderados por Hugo y Pablo Moyano, y referentes políticos.

Todo indica que será ése uno de los temas de análisis, como disparador del debate sobre la postura de la Iglesia ante la Casa Rosada, a la que públicamente ha cuestionado por sus políticas sociales hacia los sectores más vulnerables y el aumento de las cifras de pobreza.

Superada por el momento la batalla por el proyecto de despenalización del aborto, la disputa se trasladó ahora al debate sobre posibles cambios a la Ley de Educación Sexual Integral (ESI) vigente, que los obispos consideran que «va contra la cosmovisión cristiana», por lo que también podría haber un pronunciamiento al respecto.

Puntualmente, en el intercambio pastoral que se llevará a cabo el lunes por la tarde, los obispos compartirán reflexiones e inquietudes de sus diócesis, arquidiócesis o personales en relación a diferentes temáticas.

Además, entre otros temas pastorales, los obispos argentinos empezarán a preparar la próxima visita ad limina al Papa Francisco, prevista para mayo de 2019, que se efectuará en dos tandas.

La visita consistirá en la peregrinación a los sepulcros de los apóstoles Pedro y Pablo para venerarlos como fundadores de la Iglesia de Roma y así expresar y fortalecer la unidad y colegialidad de la Iglesia.

Además, cada obispo presentará un informe sobre el estado de su diócesis y tendrá un encuentro personal con el Papa, se informó.

En total, están convocados 93 obispos (diocesanos, auxiliares), tres sacerdotes administradores diocesanos y fueron invitados 43 obispos eméritos; el nuncio apostólico, el congoleño Léon Kalenga Badikebele; y un obispo electo.