Si bien Rodrigo López Molina era número puesto para ser el candidato de Cambiemos al Palacio de los Leones por caudal de votos -37% y 190 mil votos para su lista- en la elección que lo depositó nuevamente en el Concejo en 2017, sus evasivas de los últimos meses hacían dudar de su candidatura.

«Ahora, más que nunca, Rosario quiere un cambio. Vamos por una ciudad más segura, inclusiva y de futuro. Estamos listos para competir por la intendencia», manifestó el actual concejal y ex diputado.

Desde hace varios meses que el referente de Cambiemos en la ciudad no aparece en eventos públicos ni medios de comunicación. Incluso allegados al edil comentaban en voz baja que Molina no atendía llamados.

Por eso muchos dentro del partido oficialista nacional ponían en tela de juicio su presentación como candidato. Motivos no le faltan, es que el clima nacional no es el más indicado en la actualidad, y el concejal podía analizar que la situación económica no lo ayudaría a ganar la intendencia.

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Dentro de este panorama, algunos daban a Chumpitaz como su reemplazo en caso de que el joven Molina declinara su decisión de competir por la intendencia. Pero fue el propio concejal quien puso fin a las especulaciones y anunció su candidatura.

La noticia llegó el mismo día en que Angelini y Corral cerraron un acuerdo para trabajar juntos. De esta forma se anula la posibilidad de una interna a gobernador en el partido. Corral será el candidato y Angelini encabezará una lista de diputados nacionales.

Parte del acuerdo también estipula un lugar para Chumpitaz dentro de esa lista para legislador, por lo que este fue otro elemento para que se allane el camino de López Molina.

Además, Angelini y Corral habían brindado su apoyo públicamente a López Molina para competir por la intendencia de la ciudad más importante de la provincia.