Desde hace tiempo la inseguridad es el foco del mayor problema en Rosario. Durante los últimos días, distintos episodios revolucionaron a las organizaciones de la ciudad y familiares de las víctimas en reclamo de Justicia y soluciones sobre el tema. En vez de mejorar, la inseguridad parece incrementarse día a día.
En ese contexto, Miguel Lifschitz, el gobernador electo de Santa Fe, confió esta mañana que está terminando de elaborar y acordar el plan de acción para mejorar la seguridad en la provincia y planteó la necesidad de sentar en una misma mesa de trabajo «a las máximas autoridades de la Policía, a los referentes del Poder Judicial y a los legisladores para trabajar coordinados».
En declaraciones a LT10, Lifschitz indicó que «la inseguridad es el problema más apremiante que voy a tener que enfrentar como gobernador. Desde que terminó el proceso electoral estoy abocado a reuniones con expertos en seguridad y con el ministro actual. La idea es tener un plan elaborado y acordado para implementar desde el 10 de diciembre. Vamos a profundizar los cambios que se vienen realizando y hacer los ajustes necesarios”.
«Los cambios van a ser con sentido común, diálogo y racionalidad. Yo quiero sentar en una mesa a las máximas autoridades de la Policía, a los referentes del Poder Judicial y a los legisladores. Tenemos que ponernos de acuerdo para mejorar la situación de seguridad», sostuvo el ex intendente de Rosario.
En cuanto a la presencia de las fuerzas federales en la provincia manifestó que «necesitamos que estén en la provincia por nuestra condición geográfica. Tenemos un litoral pluvial de 800 kilómetros y las dos rutas nacionales fundamentales por donde ingresa el narcotráfico al país. Ni bien tengamos autoridades nacionales electas, nos vamos a sentar a dialogar».
Foto: Florencia Vizzi
