Por Aldo Battisacco – Enviado especial a Buenos Aires 

Este lunes, fuerzas de seguridad desalojaron por orden judicial a personas que ocupaban ilegalmente la histórica sede de la Confederación General Económica de la República Argentina (CGE), ubicada en calle Rivadavia 1115 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA).

La sede había sido ocupada ilegalmente por personas que respondían al ex presidente de la CGE, Oscar Gentili, tras ser suspendido por la Comisión Directiva en diciembre de 2018 ante las irregularidades en su gestión.

Para concretar la toma de la sede, Gentili cambió las cerraduras de las puertas de edificio y ubicó en lugar a personas violentas que mediante amenazas buscaron amedrentar a las autoridades legítimamente constituidas cada vez que quisieron ingresar.

En diálogo con Conclusión, el titular de Cgera, Marcelo Fernández, destacó que «hace 11 meses que la entidad esta cerrada» y que «el presidente saliente nunca entregó las llaves», de allí la necesidad de avanzar con esta medida. 

Además, expresó que al llegar a las puertas del edificio se encontraron «con una ocupación, es una verguenza e incluso no hay ninguna cámara, ni entidad empresaria en el lugar». 

«La sede estaba ocupada por personas que nada tenían que ver con la CGE histórica o algunas entidades vinculadas, este paso fue necesario para que tenga fuerza material la iniciativa que se concretó con Came, y avanzar con las premisas del espacio». 

Los empresarios apuntaron que «hay que resaltar que tras 20 años, en octubre pasado, durante una asamblea realizada en las oficinas de la Inspección General de Justicia (IGJ), con la representación de las federaciones provinciales asociadas y las entidades nacionales Cgeray Came, se logró la normalización de la CGE.