Durante la tradicional Fiesta del Señor y la Virgen del Milagro que se realizó en la ciudad de Salta, el arzobispo local Mario Cargnello le pidió al presidente Mauricio Macri, presente entre el público, que se llevará de esta provincia «el rostro de la pobreza».
Al comenzar la misa, el líder religioso se refirió a los sectores más vulnerables, a los que calificó como «maestros» y le habló directamente al jefe de Estado.
Cargnello, quien había invitado a Macri a este encuentro, agradeció su presencia y le aseguró que llegó «a un buen lugar», ya que fue «a encontrarse con el Señor».
«Cuando usted empezó (su Gobierno) dijo que iba a luchar por la pobreza cero. ¿Qué le puede decir a Salta ahora?», continuó diciendo el arzobispo.
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De acuerdo con lo que precisaron los medios locales, a lo largo de su homilía en la Catedral Basílica, Cargnello hizo extensivo el reclamo al resto de la dirigencia política.
«Salta le da rostros a la pobreza. Desde hace unos años se nos ha regalado un fenómeno de los peregrinos que cada vez son más.
Ayer veía a los mineros, son gente humilde, que trabaja en situaciones de inclemencia para darle riqueza a la república», manifestó.
Además, Cargnello resaltó que «los pobres no son una molestia», sino que «son una oportunidad» para que el país crezca.
«Por eso Mauricio, has hablado de la pobreza, llévate el rostro de la pobreza. Son dignos, son argentinos, son respetuosos y merecen que nos pongamos de rodillas ante ellos», agregó.
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Tras participar de la misa por el Señor y la Virgen del Milagro, y antes de reunirse con el arzobispo salteño, Mario Cargnello, el presidente Mauricio Macri aseguró que viajó a Salta para «rezar como uno más por el futuro de todos los argentinos».
«Rezar como uno más por el futuro de todos los argentinos», dijo Macri a la prensa local tras participar de la misa en la que monseñor Cargnello le habló directamente al mandatario tras agradecerle su asistencia.
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Polémica en la previa
La llegada de Macri evidenció una polémica dentro de la iglesia salteña luego de que el presbítero Raúl Méndez considera «inoportuna» su presencia, a la que calificó de «una provocación». «Lo más razonable es que suspenda semejante previsión y nos deje tranquilos.
Mas bien que se ocupe de resolver los graves problemas en que embarcó al país», agregó en declaraciones a El Tribuno.
Sin embargo, el arzobispo de la provincia, Mario Cargnello poco después aseguró que la presencia de Macri lo «honraría».
