El canciller Héctor Timerman afirmó que hay sectores que «están utilizando la muerte» del fiscal Alberto Nisman «para atacar al gobierno».

El canciller, en una entrevista al diario The Washington Post, aseguró que «el gobierno de Argentina tiene una fuerte historia de la defensa de los derechos humanos” y se preguntó «¿por qué vamos a cambiar en el tema de la Amia?”.

Timerman sostuvo a su vez que “siempre pedimos a Interpol que mantenga las alertas rojas” y recordó que “sólo el juez puede pedir a Interpol que las cancele, no el gobierno”.

«Es increíble que un fiscal que ha estado trabajando en este caso por diez años y que me acusa a mí y a la presidenta de tratar de cancelar las alertas rojas, no llamó a Interpol a preguntar: ‘¿Qué es lo que hace el señor Timerman cada vez que va a verlo?’. No lo hizo. No llamó al juez, él conocía la ley en Argentina«, dijo el ministro de Relaciones Exteriores.

Los periodistas Rosalind S. Helderman y Tom Hamburger, quienes entrevistaron telefónicamente al canciller, describieron que Timerman mostró «profundas reservas» sobre la posibilidad de asistencia del gobierno norteamericano para determinar cómo murió el fiscal de la causa Amia.

“Hay algunos problemas en los Estados Unidos que el FBI no puede resolver”, comentó Timerman al Washington Post, señalando no obstante que no recibió ningún ofrecimiento del bureau norteamericano.

Según el periódico, algunos legisladores argentinos y estadounidenses realizaron llamadas a la agencia federal de investigación de Estados Unidos para que ayude a investigar y sostuvo a su vez que un funcionario del Departamento de Estado dijo que la Casa Blanca ofreció asistir a las autoridades argentinas en sus investigaciones en la muerte del fiscal.

En la conversación mantenida el lunes desde Buenos Aires, el canciller rechazó además la denuncia de Nisman.

“No voy a tirar por la ventana mi historia, la historia de mi familia, la historia de mi gobierno, la historia de mis amigos que fueron asesinados durante la dictadura. No voy a hacer eso”, aclaró, y añadió: «¿Para qué? ¿Para conseguir qué? ¿Petróleo?”.

Por último, el titular del Palacio San Martín señaló que ni él ni la presidenta Cristina Fernández de Kirchner se beneficiaron con la muerte de Nisman. “¿Quién ganó teniendo al señor Nisman muerto?», preguntó, y respondió en forma contundente: “No yo. No la presidenta”.